
La alarma se encendió cerca de las 10, cuando un llamando anónimo informó a las autoridades sobre el “elemento” que surcaba la zona de la arenera, a pocos metros del antiguo puente de la ruta nacional 12 sobre el arroyo Garupá.
De inmediato, una comisión policial de la comisaría local se presentó en la escena y constató la veracidad de lo informado: se trataba de una bolsa plástica roja -utilizada para residuos patológicos- atada con una soga. Al abrir la misma, los efectivos se encontraron con una pierna izquierda humana, amputada unos 20 centímetros por encima de la rodilla.
Por orden del magistrado Fernando Verón, titular del Juzgado de Instrucción 3 de Posadas, se procedió a preservar la escena para posteriormente secuestrar el miembro y trasladarlo a la Morgue Judicial, donde será sometido a pericias.
Se sospecha que podría tratarse de un caso irregular de tratamiento de residuos patológicos, razón por la que se inició una investigación para establecer el origen de la pierna humana.