Son unas 40 familias productoras que llevan más de 20 años instaladas en Picada Guaraní. Piden que les den el permiso de ocupación para bajar la luz. Picada Guaraní está ubicada detrás de la aldea Cacique Fracrán, a la altura del kilómetro 1.300 de la ruta nacional 14. Allí viven más de 40 familias de productores que ocupan parte de una propiedad que era de Laharrague, que en su momento fue vendida a otro empresario y éste la abandonó. Junto a estos productores, hay otra picada, la Guaica, donde viven otras 50 familias que, a diferencia de sus vecinos, sí tienen energía eléctrica.
Las tierras ocupadas son alrededor de 1.100 hectáreas y habitan allí unos 90 colonos. Los más antiguos llevan más de 20 años en el mismo lugar, pero no pueden plantar tabaco porque las empresas no los pueden anotar, ya que no tienen un permiso para la ocupación. Tampoco pueden anotarse como yerbateros. En ambos casos tienen que entregar a nombre de otro productor y no tienen ningún beneficio. Por eso reclaman que la Dirección de Tierras y Colonización les informe sobre las solicitudes que hicieron desde hace ya más de cuatro años.
Padecimientos
Los vecinos comenzaron a gestionar también la extensión de los cables de energía eléctrica hace casi un lustro y desde entonces vienen con la promesa de que les van a colocar el servicio. Sin embargo, en los últimos meses la negativa por parte de EMSA hace más difícil que concreten su sueño.
Isaías Rodríguez Ferreyra es un vecino que vive desde hace casi diez años en esa picada y contó a PRIMERA EDICIÓN que muchos de nosotros compró la mejora a otro colono que ya vivía en el lugar. No sabíamos la situación de la tierra y tampoco sabemos cuál es la situación actual. Pero nosotros hoy estamos reclamando luz eléctrica porque nuestros vecinos de la Picada Guaica ya tienen luz y ocupan la misma tierra que nosotros. Queremos que EMSA nos dé la oportunidad de tener energía eléctrica.
Los vecinos viven a unos cinco kilómetros de la ruta y no cuentan con una escuela primaria para los chicos, por lo que desde hace varios años vienen reclamando la creación de un aula satélite.
En diciembre del año pasado, les aseguraron que para el inicio lectivo de este año van a contar con un aula satélite dependiente de la Escuela 359 Cacique Fracrán del kilómetro 1.304.
Mario Núñez, otro vecino de la picada Guaraní, explicó hicimos un censo y son 70 chicos en edad escolar que viven en la zona. La mayoría no asistió a la escuela el año pasado. Nos aseguraron en la Supervisión Escolar de San Vicente que para marzo de este año comenzarían las clases. Gracias a los vecinos de todo Fracrán, de distintas colonias pudimos concretar el edificio. Está terminado y queremos que la próxima semana comiencen las clases. Para ello, necesitan que les bajen la luz.
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