En Misiones las PyME no podrán deducir contribuciones patronales del IVA. La situación tributaria local será idéntica a la de los grandes centros urbanos del país. Adelantan que tendrá resultados contrarios a lo planificado. De acuerdo a un informe publicado por la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CACyS) la reforma tributaria concebida por el Gobierno nacional afecta directamente a las asimetrías regionales y a las Pequeñas y Medianas Empresas (PyME).
Debido a que la reforma fiscal impulsada por Nicolás Dujovne, ministro de Hacienda de la Nación, derogó beneficios en aportes patronales para las empresas radicadas afuera de la Capital Federal, en Misiones las PyME no podrán seguir deduciendo contribuciones patronales del IVA.
Así se dio inicio a una quita progresiva del beneficio que poseían las industrias, motivo por el cual la situación tributaria para las PyME de Misiones será idéntica a la de los grandes centros urbanos del país, dejando de lado que la facturación y las condiciones económicas de competencia son muy distintas entre las regiones.
Actualmente dentro de Posadas las PyME pueden deducir un 9,70%, pero a partir del próximo año el porcentaje se reducirá a 7,30%, en 2020 bajará a 4,85%, en 2021 a 2,45%, hasta que finalmente para el 2022 la deducción desaparecerá y las PyME deberán abonar completa la totalidad.
Para el interior de Misiones durante el 2018 el beneficio se mantendrá en un 10,75%, al llegar el 2019 se reducirá a 8,05%, en 2020 a 5,40%, y en 2021 a 2,70%, para desaparecer definitivamente en el 2022.
Ante esto la CACyS adelanta que la reforma tributaria aprobada a fines del año pasado tendrá en su práctica resultados contrarios a los objetivos planteados en materia de contribuciones patronales. Según plantean desde la Cámara los factores básicos de la reforma, como la incorporación del denominado mínimo no imponible, producen efectos de signo contrario en el impacto global sobre los empleadores del sector privado.
Es evidente que la consecuencia de estas medidas va en claro detrimento de las economías regionales y de las que tienen en su composición de la estructura empresaria un predominio de las empresas PyME. Así es que se acentúan las asimetrías regionales existentes, los problemas de las economías regionales y la pérdida de competitividad de las PyME, remarcan en el informe.
Como consecuencia directa anticipan que se producirán procesos de expulsión de mano de obra y caída de actividad en sectores que han sido importantes fuentes de riquezas en el pasado o que cuentan con fuerte potencialidad a futuro.
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