Ocurrió este lunes, cerca de las 18.30, cuando dos adolescentes de 15 y 17 años fueron alertadas por el chofer de la línea 23 que dos invidiuos les habían quitado sus teléfonos sin que ellas se percataran.
Luego de ser alertadas por el conductor del transporte, las chicas descendieron de la unidad y pidieron ayuda a cadetes de la Escuela Superior de Policía quienes lograron interceptar a los malvivientes, dos hombres de 26 y 35 años, luego de una breve persecución.
Ambos fueron alojados en sede policial donde permanecen a disposición de la Justicia.
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