La poética imagen del arbolito y las hojas en tonos marrones cayendo con suavidad que hemos plasmado en nuestros cuadernos y carpetas escolares parece una utopía ante los fundamentalistas de las motosierras.
Llegó el otoño, no dejemos ningún árbol con hoja pareciera ser la descripción que corresponde para nuestras ciudades. Y la operación se realiza con motosierra, cortando las ramas y no solo las puntas, sino los troncos gruesos, provocando graves heridas y dejando a los árboles sin hojas.
Compartimos algunas recomendaciones del libro Árboles (2009) de las ingenieras agrónomas (UBA) Guarnaschelli y Garau, 2009.
¿Error conceptual?
El razonamiento que predomina en esta época del año parece ser: hay que podar -sí o sí- porque llegó el otoño. Falso.
En realidad el razonamiento es: aprovechemos los días fríos para podar los árboles que lo necesiten. Solo si lo necesitan.
Es decir, aparentemente un sentido muy generalizado en nuestra región es que hay que podar cada año para que el árbol se fortalezca. También aparecen versiones de que la poda se hace para evitar que las hojas ensucien durante toda la temporada las veredas -según indagación realizada por Sombrita Misionera.
La mejor poda es la que no se hace, señalan los botánicos con insistencia. En caso que sea necesario debe hacerse a conciencia, conociendo la estructura y funcionamiento del árbol. Así se evitará dañarlo, lastimarlo, enfermarlo.
Las herramientas a usar pueden ser tijeras de mano, serruchos de poda, sierras o serruchos.
Las motosierras se deben usar pero con un criterio de preservación.
No porque este equipo permita cortar o talar un árbol en una tarde, se debe abusar del poder de la motosierra. La herramienta debe adaptarse a la necesidad del árbol. No al revés.
No podar todas las ramas
Los árboles deben podarse cuando tienen altos niveles de reservas, lo cual generalmente ocurre a finales de invierno, es decir, meses de julio y agosto.
Se debe evitar la poda cuando las hojas estén cayendo o brotando, porque puede afectar el posterior crecimiento de la planta.
Y reiteramos: nunca se deben podar todas las hojas y ramas de un árbol. Estas podas drásticas enferman el árbol que en el corto plazo puede morir, enfermarse, infectarse con bacterias y hongos que debilitan su tronco y ramas y termina cayendo o muriendo de pie.
En Posadas, según establece el Plan Forestal Urbano vigente desde 2013, la poda es responsabilidad de la Municipalidad. Se realiza en base a un cronograma de poda. Para los casos puntuales que requieran los vecinos, se debe pedir mediante nota a la Delegación Municipal o al edificio central. La norma también señala que toda poda, ya sea en veredas -espacios públicos- o patios -espacios privados- deben ser autorizadas.
Podas de mantenimiento, sí. Masacres, no
Las podas de mantenimiento consisten en extraer las ramas secas o rotas y las ramas con excesiva cantidad de rebrotes para mantener la copa sana y equilibrada.
No se debe cortar más de la cuarta parte de la copa viva en una sola operación, señalan Guarnaschelli y Garau.
Es decir, si el árbol tiene cuatro ramas, se podría extraer como máximo, una de ellas. Si tiene ocho ramas, extraer como máximo dos. Nunca se deben extraer todas las ramas.
Esta poda de mantenimiento puede ser de aclareo, entresacando ramas de distintos niveles de la copa. También se aplica poda de reducción, que implica cortar las ramas de más arriba de la copa, para evitar que toquen tendido eléctrico o techos.
Otra poda es de levantamiento, que consiste en podar un 30% de la copa, en su parte inferior, quitando los brotes -chupones y ramas bajas, dejando un 70% de copa hacia arriba.
Cuestión de estética
Un motivo fundamental por el cual no se debe hacer poda drástica con corte de ramas gruesas es un motivo estético: los árboles mal podados crecen deformes.
En la imagen se puede apreciar como las sucesivas podas dejaron a un jacarandá sin ramas, una especie de columna con una sola rama muy fina intentando crecer.
Sombra, casi nada. Enfermedades, todas. Y a la vista queda con aspecto grotesco, deforme, sin la armonía que naturalmente tiene cada especie de planta.
Avanza el otoño y seguramente los trabajadores motosierristas pasarán por la casa de los lectores de este Diario. Los invitamos a definir el corte -previa autorización municipal- a conciencia. Cortando y retirando solo algunas ramas.
Cómo denunciar
En Posadas las talas y podas que no poseen autorización pueden denunciarse en:
Dirección de Ed. Ciudadana. 444-9010
Servicios Públicos 4597032 / Dirección de Espacios Verdes: 4465300 (Responsable: Ing. Wilfredo Guerrero).
Delegaciones Municipales Barriales.
Centro de Atención al Vecino 0800- 888- 2483.
Por: Lara Schwieters
Lic. En Comunicación Social, proyecto Sombrita Misionera
Discussion about this post