Desde varios sindicatos cargaron duro contra la medida que tomó el gobierno nacional. El secretario general de ATE Misiones, César Fariña, la calificó como una estrategia de despidos encubiertos.Mediante una firma por decreto del presidente Mauricio Macri, se estableció un programa de retiros voluntarios dentro del Estado nacional destinado a trabajadores que rondan los 60 años de edad y no cuentan con el tiempo de servicio necesario para obtener la jubilación ordinaria, entre otros requisitos.
El programa abarcará a trabajadores del Poder Ejecutivo nacional, ministerios y organismos descentralizados como el Programa de Atención Médica Integral (PAMI), Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES), Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA), Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI).
Al respecto el secretario general de ATE Misiones, César Fariña, calificó la medida del Gobierno nacional como una estrategia de despidos encubiertos.
Según Fariña, se intenta hacer creer que es el trabajador el que decide, pero también hay que entender que existe todo un sistema de presión muy fuerte que empuja a los trabajadores a tomar estas decisiones, debido a que se da en un marco de achicamiento profundo del Estado y sus empleados, entonces los trabajadores, por la preocupación, optan por el retiro voluntario antes de quedarse sin nada. Desde la organización decimos que esto es un engaño, remarcó.
Además cuestionó que hay una clara falacia planteada desde los sectores que representan a los intereses del Gobierno, cuando se dice que el Estado está sobrecargado de trabajadores, que los salarios están muy altos y que hay que reducir los costos. Eso es mentira. No es cierto que sobren trabajadores en el Estado, al contrario, están faltando.
Jorge Koki Duarte, secretario general de la CTA Autónoma Misiones, consideró que es una medida retrógrada y desafortunada. Desde el Gobierno atribuyen que es mucho el gasto del Estado por el recurso humano, pero eso es una mentira, una falacia.
Para Duarte, el decreto de Macri va en contramano de lo que realmente se necesita, ya que según su opinión van a hacer hincapié con los retiros en las áreas de salud y educación, cuando en realidad hay que poner al servicio de la comunidad al propio Estado y en muchos lugares del país se llega con muy pocos recursos humanos.
Con el plan del Gobierno nacional se plantean tres opciones para acceder a los retiros voluntarios.
El primero de ellos está destinado a las personas que tienen 65 años o más pero no cubren la cantidad de aportes necesarios. A este grupo se le ofrece la posibilidad de recibir 24 cuotas mensuales iguales no remunerativas equivalentes a su salario neto al momento de aceptar la baja. Si el beneficiario se jubilara dentro de ese plazo el plan se verá interrumpido.
El segundo grupo cubrirá a los que tienen 60 años pero no alcanzan la categoría anterior. A estos se les pagarán hasta 36 cuotas mensuales y no deberán superar las 12 cuotas una vez cumplidos los 65 años.
La tercera categoría es para los menores de 60 años, con más de dos años de trabajo, recibirán una especie de indemnización menor de hasta 6 cuotas según la antigüedad, luego pasarán a ser entre 6 y 24 cuotas mensuales adicionales no remunerativas. Las cuotas serán sobre el 70% del sueldo neto.
Desde ATE cuestionan que el programa trabaja de forma equivocada el concepto de relación con el sector privado, ya que supone que el trabajador tiene que ser absorbido por el sistema privado. El problema es que el sistema privado no se ha activado. Las inversiones y la lluvia de dólares que anunciaba el Gobierno no han llegado. No se ha generado trabajo en función de las inversiones privadas. Eso no ocurrió ni va a ocurrir porque otra vez vamos a estar con la inflación por encima del 24%. No hay garantías desde el Estado. No existe un escenario como para que un trabajador deje o pierda su trabajo y sea incorporado al ámbito privado.
El decreto 263/2018 publicado en Boletín Oficial agrega que los agentes que adhieran a algunos de los planes de retiro voluntario continuarán gozando de la cobertura médica asistencial de obra social durante el plazo de percepción de las cuotas o hasta la obtención del beneficio previsional.
El decreto firmado por el presidente Macri rige para los empleados de categoría planta permanente y para quienes se rijan por ley de contrato de trabajo.
Desde el Poder Ejecutivo consideran que hay cerca de 80 mil trabajadores en condiciones de acceder a este plan que busca reducir el gasto público, aunque en principio se estiman que serían entre 3.000 y 5.000 los que optarán por el retiro voluntario.
Por su parte, desde la Unión de Personal Civil de la Nación (UPCN) manifestaron estar en contra de la medida y además advirtieron que la masa salarial estatal no supera el 11% del presupuesto.
Al mismo tiempo, el titular de UPCN, Andrés Rodríguez, manifestó que cuando se aplican los regímenes de retiro voluntario se van los mejores cuadros del Estado porque los empleados más capacitados son los que tienen posibilidad de conseguir un trabajo en el campo privado.
Además cuestionó que si el Gobierno considera que estos empleados deberían estar adaptados a los avances tecnológicos lo mejor sería capacitar y formar.
Los sectores exceptuados de la medida son: personal de las Fuerzas Armadas, Seguridad, Policía, y Agencia Federal de Inteligencia (AFI). Tampoco podrán incluirse a los docentes, profesionales de la salud o científicos que se desempeñen en el Servicio Exterior de la Nación.
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