Un joven de 18 años, buscado por varios hechos delictivos que lo involucran de manera directa, fue descubierto ayer oculto dentro de la heladera de la vivienda de su novia en el barrio Giovinazzo, zona sur de esta capital.
Tras un operativo de miembros de la Dirección de Homicidios, Comando Radioeléctrico San Isidro y comisaría Novena, alias Kaki fue detenido por orden del juez de Instrucción 7, Carlos Giménez, por el ataque con arma de fuego ocurrido el jueves 29 de marzo en el barrio Belén en el que resultó gravemente herido un joven de 22 años tras una presunta discusión relacionada al incendio de una precaria vivienda de la zona.
Según fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN, el sospechoso le habría disparado con un revólver calibre 22 plateado en el abdomen a su víctima luego de un cruce de reproches y amenazas cruzadas.
Las mismas fuentes detallaron que los investigadores de la Dirección de Homicidios lo habían ubicado en el barrio Giovinazzo varios días antes. Cuando confirmaron de quién se trataba, el seguimiento se profundizó hasta primera hora de la mañana de ayer, cuando se amplió el procedimiento con la colaboración de los efectivos de la Unidad Regional X mencionados.
Pero Kaki no sólo tenía problemas con la ley por este episodio, también lo buscaba el juez de Instrucción 6, Ricardo Balor, por un hurto en grado de tentativa ocurrido el 9 de septiembre de 2017 y Fernando Verón, de Instrucción 3, en una causa por lesiones y amenazas de muerte del sábado 27 de enero de este año.
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