Marisa Almeida comenzó con un muñeco que aprendió en Utilísima. Hoy hace de todo, siempre innovando con amor. Trapitos Metaleros, se llama su emprendimiento. Fue en 2014 cuando la conocimos a Marisa Almeida y la volvimos a encontrar en la feria de Espacio Mujer con sus duendes, que hicieron furor.
Siempre le gustó crear muñecos, pero se diversifica: realiza ropitas para mascotas, puf y juegos didácticos para los más pequeños hechos de tela. Tiene libros que son como sobres también de tela con elementos para que los chicos jueguen y despierten su creatividad.
Los cuerpos de los duendes están logrados con porcelana fría y cada uno es diferente a otro. Ellos llevan vestimentas particulares para estar en la selva, tienen flechas, otros confeccionan atrapa sueños, los del dinero custodian cajas y los sabios sostienen pergaminos o libros, según el duende. Cada uno lleva una leyenda como el que cumple tus deseos, o el de los leños cargados de sabiduría ancestral.
Así, Marisa logró despertar el interés de quienes visitaron la feria y contó a PRIMERA EDICIÓN que su pasión por el arte continúa intacta.
Fue en la época del programa de televisión Utilísima cuando aprendió a hacer muñecos, el primero fue un cocinerito, hacía varios y salía a venderlos para tener un dinero extra porque era madre soltera y tenía que hacer algo, pero todo lo que hice y sigo haciendo es con mucho amor porque me encantan los trabajos manuales.
Pasó el tiempo y se casó y vinieron más niños, entonces sí preferí ser mamá y quedarme en casa así que seguí creando, aprendiendo como autodidacta porque no pude estudiar, seguí leyendo revistas y ahora sigo con Internet. Cada muñeco que creaba lo hacía con más empeño y los vendía en mi barrio -en Garupá-, en kioscos y librerías. Hago para cumpleaños si me piden, hago muñecas para colgar en la puerta. Los primeros que usaron mis juguetes fueron mis hijos y sí a ellos les gustaba seguía haciendo más.
Marisa crece y crecieron los niños, seis hijos que disfrutan tanto como los que reciben regalos hechos por ella.
La emprendedora confiesa: Me encanta renovar, crear y sobre todo crecer. Mi intención es demostrarles y enseñar a mis hijos que todo lo que uno se propone lo puede lograr. Solo necesitás creer en vos y amar lo que hacés.
Como ven, la historia de Marisa Almeida es una vida llena de decisiones, pasión, mucho amor y ganas. Su imaginación le llevó a crear tantas cosas diferentes que ni ella puede definirse por una sola. Así como le gusta coser realiza las prendas de los duendes y todos sus muñecos. Mientras que los cuentos la llevaron a ese mundo mágico no solo de juguetes sino también de duendes traviesos como fue el nombre de su primer emprendimiento. Ahora tan diversificada continúa con Trapitos Metaleros.
Contactos:
En las ferias de la costanera está siempre. En Facebook o enviar un WhatsApp al 3764-755016.
Discussion about this post