La iniciativa, presentada por la renovadora Natalia Giménez, busca incentivar y dar apoyo institucional a las festividades y actividades sociales y culturales realizadas en espacios públicos de la capital misionera.
El proyecto de ordenanza tiene como objetivo que las fiestas barriales que se inscriban en el registro puedan acceder a los diversos programas y servicios municipales existentes, como sonido, escenario, iluminación y baños químicos, entre otros, para optimizar su desarrollo.
“Sabemos que en nuestra ciudad existe una gran cantidad de fiestas barriales populares en las que los vecinos no solo comparten momentos de alegría haciendo uso de plazas, calles y espacios públicos en general, sino que, a través de estos encuentros, se va forjando la identidad de cada barrio, de cada zona de la ciudad”, expresó la autora del proyecto.
Giménez aclaró que “no se busca solamente crear un registro, sino también fortalecer un modelo de Estado municipal que fomente el encuentro entre los ciudadanos, el respeto por el patrimonio urbano y la memoria colectiva, con políticas públicas que incentiven la promoción cultural”.