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Ninguno de sus antecedentes lo describen como un buen vecino o un muchacho de cumplir con códigos delictivos. No respetó ni a la vendedora de quinielas de su barrio y le arrebató a punta de cuchillo la cartera con la recaudación. Conocido como “Puchero” y con 37 años, regó sus andanzas delictivas no sólo en esta capital, incluyó víctimas en Alba Posse y Oberá, según sus deplorables registros.
El domingo por la noche, su ambición volvió a traicionarlo y cayó detenido tras robar diez botellas de whisky importado de un hipermercado de la avenida Quaranta y Tomás Guido de Posadas.
Las cámaras de seguridad lo captaron en su faena de movimientos de distracción y acondicionamiento entre la ropa de preciadas botellas del mejor blend británico.Selectas ediciones de las marcas Johnnie Walker Gol Label y Chivas Regal. En total, un botín de veinte mil pesos oculto entre prendas de vestir.
Pero sus andanzas no se limitan al hurto de whiskies, en menos de cuatro años registró su participación y sospechas de una serie de delitos contra la propiedad de múltiples manera.
En enero de 2014 pergeñó y casi logra ejecutar con éxito el robo a una casa de electrodomésticos de Alba Posse. Con cuatro secuaces de 54, 49, 32 y 29 años, tres directos y un “campana” a bordo de un Fiat Línea, alcanzaron a hurtar dos televisores LED, y una docena de cámaras digitales y teléfonos móviles.
La maniobra consistió en distraer al propietario del comercio con múltiples consultas por precios mientras “Puchero” y uno de sus cómplices intentaban escapar con los equipos electrónicos.
El dueño del local sospechó lo que sucedía y logró interceptar el automóvil antes de que partieran hacia Posadas. Efectivos de la comisaría local cumplieron con lo restante, detener a los sospechosos y reintegrar los elementos.
Nueva caída
Para “Puchero” fue sólo el primero de sus traspiés. Un año después retornó a una celda luego que lo atrapara un bombero de la Policía provincial de franco cuanto buscaba huir con una cartera con diez mil pesos en cercanías al mercado La Placita.
Se la había arrebatado a punta de arma blanca a una vecina que vendía quinielas por calle Sarmiento y avenida Roque Sáenz Peña, frente al tradicional paseo de compras de Villa Blosset. La mujer lo conocía, hace pocos meses había fijado su domicilio en la zona.
Recobró la libertad y no tardó 48 horas en intentar hacer dinero de manera ilícita. Con su pareja y otro hombre, pugnó por robar otra casa de electrodomésticos. Esta vez un local de una cadena nacional ubicada en el pleno centro de Oberá.
Lo curioso fue que el encargado del comercio los reconoció porque días previos intentaron hurtar una caja regsitradora y antes de ser atrapados huyeron con las manos vacías. Fuerte de memoria visual, los identificó de inmediato porque los rostros y resto de las fisonomías quedaron grabados por las cámaras de seguridad.
Cambio de “rubro”
Tal vez por su relativa ineficacia en hurtos a casas de artículos del hogar, decidió incursionar en la modalidad “motochorro”. Pero la mala fortuna le dio pocos días de ventaja.
El 28 de marzo de 2015 intentó robarle las pertenencias a dos adolescentes de 16 y 17 años sobre la avenida Ingenieros de Oberá. Blandió un cuchillo y les quitó sus smartphones. A las dos horas, uniformados de la Unidad Regional II lo volvieron a atrapar y fue reconocido por sus víctimas.
Ni cerca de parar
Purgó sus andanzas pero no se alejó de ellas. Desde marzo de este año sus pasos en Posadas comenzaron a ser seguidos por pesquisas de la Dirección de Investigaciones Complejas de la Policía. Luego que escapara de un robo a una vivienda en jurisdicción de la seccional Tercera.
Se volvió escurridizo y violento al extremo. Al menos lo demostró en un operativo de aprehensión en el complejo habitacional A4, en el sur de Posadas, escapó resistiéndose a golpes contra un policía y corriendo con asombrosa capacidad.
Sumó un grave renglón en rojo a su prontuario, por los delitos de “lesiones y resistencia a la autoridad”. Sin embargo continuó en libertad durante cuatro meses. Hasta el último domingo.
Tanta ambición por transformar en billetes los whiskies importados lo devolvió a una comisaría, esta vez la Decimoséptima, y ahora su imagen es chequeada con registros de otros comercios de la provincia por sendos robos cometidos.
De ratificarse las sospechas, “Puchero” podría continuar por mucho tiempo en prisión.