Los maleantes escaparon con tazas de porcelana, un ropero, una cocina a gas, sillas, una cama, una escalera, una pala, una perforadora eléctrica, cinco copas finas de vidrio, un ropero, un “puf” de cuero con patas de madera, una escalera de madera y hasta el inodoro, entre otras cosas. Todo fue recuperado en una zona de monte de la localidad.