Crece el descontento de los habitantes de esta localidad luego de presenciar una serie de cesiones que aprobaron los concejales -a instancias del intendente Miguel Dos Santos, según trascendió- favoreciendo los intereses privados del pastor de una iglesia evangélica.
En principio, los ediles avalaron la cesión de un terreno considerado espacio público y reserva ecológica para la construcción de un colegio privado que sería de uso exclusivo para los integrantes de la iglesia evangélica.
Y más recientemente, una familia se “instaló” en el predio de la fábrica conocida como “La Mandioquera”, en un presunto acto de usurpación adjudicado a los intereses del mismo pastor y con el aval del alcalde, de acuerdo a las acusaciones reiteradas por los vecinos autoconvocados y diversos referentes de la defensa del medio ambiente.
Así, las acciones cuestionadas involucran directamente a Dos Santos y al pastor evangélico Celso Ramos.
Espacio verde
En primer lugar, los vecinos autoconvocados y ambientalistas indicaron que el terreno de la manzana 94, que anteriormente fue destinado a la construcción de una plaza, ahora pasará a manos de la institución religiosa “Asamblea de Dios” para la ejecución de un edificio escolar, por aprobación del Concejo Deliberante.
Esto despertó el reclamo de ambientalistas y vecinos, que pidieron explicaciones al intendente Miguel Dos Santos para justificar la donación del espacio público hacia un proyecto privado.
Los tres lotes en cuestión fueron donados en su momento por el Gobierno provincial, durante la década de 1990, con el fin de mantener los espacios verdes del pueblo. Dos de esos lotes fueron destinados a la creación de un jardín botánico.
Ahora, la donación aprobada por el Concejo Deliberante habilitaría que el Instituto Araucaria, un colegio privado religioso que funciona en la ciudad desde 2014 dentro del mismo predio donde se encuentra la iglesia principal de la Asamblea de Dios, a cargo del pastor Celso Ramos, tome posesión y disponga del tercer lote.
De acuerdo a lo que remarcaron los vecinos autoconvocados y ambientalistas, al principio la mayoría de los concejales rechazaron la idea de ceder el espacio público, pero luego “negociaron y aprobaron la ordenanza del desinterés del municipio por el lote, por lo cual, el terreno vuelve a la provincia y puede ser entregado al colegio privado”.
“La intención del intendente con la donación del espacio verde a una iglesia que tiene muchos fieles es asegurarse una mayor cantidad de votos para las elecciones del próximo año”, criticaron.
Cabe recordar que la “desafectación parcial de la manzana 94” fue aprobada en la sesión ordinaria del 26 de junio de 2018 por los concejales sobre el dictamen Nº24/2018 de la comisión de Legislación, Presupuesto, Impuesto y Hacienda.
Al mismo tiempo, los vecinos autoconvocados y ambientalistas rechazaron el “desinterés que abrió las puertas para la donación por parte del Gobierno de la provincia”, además de repudiar la sesión del Concejo Deliberante.
También aclararon: “No estamos contra la construcción de una escuela, pero sí rechazamos que se construya en el espacio público donde hay especies centenarias de araucaria angustifolia y timbó que cuentan con más de 100 años de antigüedad y son protegidos por ley”.
En relación a esto, ampliaron: “Este colegio será solamente para las familias que forman parte de la iglesia, lo que consideramos resta beneficio para el resto de la ciudad”.
Método de usurpación
Por otra parte, el mismo grupo de manifestantes mencionó otra situación irregular que involucra a la presunta “sociedad de favores” entre el pastor Celso Ramos y el intendente Miguel Dos Santos.
Hace exactamente un año, autoridades del Gobierno provincial cedieron en “comodato” un depósito ubicado en las instalaciones de la exfábrica de almidón de mandioca, más conocida como “La Mandioquera”, ubicado en el Lote 6, zona de gramado de San Pedro, sobre la ruta nacional 14, y que consiste en un terreno de 20 hectáreas.
Actualmente el predio de “La Mandioquera” se encuentra usurpado por una familia que cuenta con 6 niños menores de edad, según remarcaron los vecinos autoconvocados y ambientalistas.
Con esto, cuestionaron que la familia ocupa ilegalmente el depósito que fue cedido por la Provincia a la Municipalidad con fines de almacenamiento de insumos varios. Pese a ello, está siendo utilizado como vivienda.
“El lugar no está en condiciones de ser habitado, menos por una familia numerosa, porque no cuenta con las condiciones mínimas necesarias”, señalaron.