Una vez más, oficialmente, el Nordeste argentino del que forma parte la provincia de Misiones terminó con la mayor suba de precio en el país.
Esta región a la que le suspendieron la mayoría de las grandes obras del Plan Belgrano; en una Misiones sin gas por redes y con un proyecto de Gasoducto del NEA que no llegará a la tierra colorada; con alto costo de la electricidad que precisamente en septiembre tuvo otra suba (y que no sería la última); con uno de los combustibles más caros del país.
Un NEA dentro del territorio nacional castigado con mucha pobreza e indigencia.
Y lo reveló un informe oficial del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), es decir, no se trata de una especulación política opositora. En los primeros nueve meses, la mayor alza de precios se registró en la región del Noreste con un 33,6%; seguida por la Patagonia con un 33,1%, la del Noreste con un 32,9% y la de Cuyo con 32,8%.
Posteriormente se ubicaron la región del Gran Buenos Aires, con un aumento en el costo de vida acumulado del 32,4% y la región Pampeana que cerró con un 32,1%.
Esa mayor suba en los diferentes rubros, comparando septiembre con agosto de 2018, tuvo como mayor protagonista de los tarifazos al boleto del transporte Según el INDEC la variación en la región fue del 50,4%. Seguido de vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles con un alza del 43%.
Sin embargo, cuando se compara septiembre de 2017 con el mismo mes de este año, la suba en el transporte fue del 63,1. Vale recordar que en el Sistema Integrado (Posadas, Garupá y Candelaria) ya de acumularon tres boletazos por casi el 70% de aumento.
Estas cifras no hacen más que alertar que los problemas sociales se profundizarán porque los salarios no acompañaron de igual modo a los precios. Significarán más pobres e indigentes. Frente a un país central al que no le es suficiente la estadística para repensar su trato con el Nordeste.