El intenso calor deja consecuencias en las producciones en las chacras. Es por eso que se nota la faltante de los cultivos sobre todo de hojas como ser acelga, rúcula, lechuga y perejil, entre otros. Y eso conlleva a que las producciones cuesten un poco más caro. Las plantaciones que están más complicadas son los que se hacen a cielo abierto.
Además, la faltante de producción genera que algunos feriantes opten por no participar de las ferias, ya que trasladarse hasta Posadas, por ejemplo, implica una inversión debido a que tienen que cosechar los productos, sacarlos de la chacra y abonar el flete para llegar a la ciudad capital. Este último ítem se había visto afectado por los constantes aumentos del combustible, por lo que los precios del acarreo se elevaron el año pasado.
Sobre los precios, José Villasanti, presidente de la Feria Franca de Posadas y productor de la zona, expresó en diálogo con PRIMERA EDICIÓN que “cuando hay faltante de un producto suele subir los precios, pero tampoco mucho lo que se puede aumentar porque sino no se vendería los productos que quedan”.
En este punto, detalló que la diferencia en los productos ronda los 5 pesos, pero los feriantes tratan de mantener algunas ofertas para seguir comercializando la producción.
Por ello, el mazo de lechuga pasó de costar 10 pesos a valer 15 pesos y el de acelga se consigue a 15 pesos un atado o dos por 25 pesos.
Asimismo, remarcó que “los precios después se vuelven a reacomodar cuando haya producción, pero por ahora subió un poco, sin embargo tampoco la diferencia es del 100 por ciento como se ve cuando hay faltante de otros productos”.
En lo que refiere al calor, dijo que “este es un verano muy complicado porque el sol está muy fuerte y daña a todas las plantas y en todas las zonas afecta por igual”. Días atrás las temperaturas de la tierra colorada se posicionaron por encima de los 30 grados y la sensación térmica estuvo por arriba de los 40 grados.
Por su parte, el presidente de la Feria Franca de la zona Centro y productor, Eugenio Kasalaba subrayó que “los colonos no tienen suficiente cantidad de producción y lo principal que más se quema es lo que está a cielo abierto y lo que está en invernáculo también sufre, porque bajo cubierta se contabiliza unos cinco grados más que afuera”.
Apuntó que “las plantas que se logran sacar tienen algún problema, por ejemplo la lechuga queda amarga porque para crecer necesita mucha agua y no tiene que estar expuesta a temperaturas tan altas, además las otras plantas quedan sapecadas”.
En cuanto a la faltante de las producciones, Villasanti comentó que “cuesta que germinen las semillas por eso no hay producto”.
Expresó que “hay que aguantar que pase este calor y tratar de prepararse para empezar con la siembra de todo lo que sea hoja, porque se debe recuperar todos estos faltantes”.
Mientras, Kasalaba indicó que “los productores no quieren sembrar porque la semilla no está barata y se le pierde por la falta de humedad y se termina quemando”.
Por otro lado, en lo referente a los riegos y el agua, Villasanti recordó que “en la Zona Sur hace unas dos semanas que no llueve de forma intensa, pero en el interior cae algún que otro chaparrón y eso también ayuda”.
Por su parte, Kasalaba expuso que en la Zona Centro no hay faltante de agua. “En diciembre hubo mucha lluvia, pero hay que ver si en estos días habrá una lluvia importante o no, sino las napas ya comienzan a descender y entonces puede llegar a faltar agua”, remató.