Inspirado por las palabras de Jesús “tuve sed y ustedes me dieron de beber”, el equipo de Cáritas Diocesana en esta ciudad organizó una campaña de donación de agua para los más necesitados.
Esta iniciativa surgió ante la dramática situación que viven muchos barrios capitalinos, donde la falta del líquido vital se siente desde diciembre el año pasado y ya provocó innumerables protestas.
PRIMERA EDICIÓN se comunicó con el sacerdote Alberto Barros, vicepresidente de Cáritas Diocesana Posadas, quien explicó que “desde el viernes pasado estamos recibiendo el agua en la sede de Cáritas Diocesanas, en Félix de Azara entre San Martín y Sarmiento, a la vuelta de la Catedral, de lunes a viernes de 8.30 a 12. Además, pueden acercar las donaciones en la parroquia Sagrada Familia los miércoles y viernes en el horario de secretaría, a partir de las 17, o los fines de semana durante la misa”.
Respecto a las donaciones, añadió que “todo lo que llegó hasta el momento fue agua mineral comprada que luego será distribuida. Esto es algo pequeño que podemos hacer, es un gesto y la verdad es que la gente está trayendo bastante y nos alegra mucho”.
Aunque el cronograma de distribución aún no está establecido, Barros detalló que “por ahora empezamos con el barrio Belén y zonas aledañas de Itaembé Miní. Ya organizamos con el equipo de Cáritas del barrio Belén, donde está la hermana Ana Delia, para que sea el primer barrio donde enviar el agua. A su vez, esta distribución planea hacerse con prioridad entre familias que tengan personas ancianas, niños y enfermos, para brindar un acceso al agua mineral mientras se soluciona este tema. Sin embargo, la necesidad es tan grande también en otros puntos que, en la medida que tengamos más disponibilidad del agua, ya estamos pensando otros lugares como los barrios de Garupá”.
Más allá de eso, “hacemos un llamado de conciencia para aquellos vecinos que poseen el servicio en sus hogares para que de manera directa compartan con los que no poseen, para generar una especie de red solidaria entre las familias. De esta manera, apelamos a las palabras de Jesús que decía a sus discípulos que todo lo que se hace por alguien con sed lo hacen por él, con la famosa frase ‘tuve sed y ustedes me dieron de beber’. Desde ese mandato, y ante la gente que sufre, dijimos que algo debíamos hacer, así que invitamos a las familias que tienen agua a que compartan con aquellas que no”, remarcó Barros.
Consultado por el contexto en la capital provincial que llevó al surgimiento de esta campaña de Cáritas, Barros opinó que “frente a la noticia de tantas familias, cientos de personas, sin acceso al agua potable y segura, tanto en Posadas y Garupá como en otras localidades, nos parece un tema muy grave, porque hablamos del agua potable y segura como un derecho básico fundamental y universal para todo ser humano. Con esto se pone en juego la vida de las personas y mucho más de los sectores más humildes, los ancianos, los niños y los enfermos, porque todo sabemos que la falta de agua potable y segura genera enfermedades entre otras dificultades”.
Asimismo, el párroco lamentó el hecho de que “la situación es aún más grave si pensamos que somos una provincia que tiene un gran disponibilidad de agua: estamos rodeados de ríos y asentados sobre una de las mayores reservas de agua del planeta, el Acuífero Guaraní, y sin embargo nos encontramos con este problema”.
En este sentido, “es evidente que acá algo no se está haciendo bien y existe una falta de inversión de los organismos del Estado que tienen la obligación de proveer agua potable segura y en cantidad suficiente para cada familia. No hay mantenimiento ni planificación suficiente, se rompen caños todo el tiempo y el agua no llega a todos los lugares en una ciudad que crece cada vez más”, lamentó.
Lugares para donar
Las botellas de agua mineral pueden acercarse a la sede de Cáritas Diocesana (calle Félix de Azara, entre San Martín y Sarmiento) o a la parroquia Sagrada Familia, en Roque Sáenz Peña entre Salta y Tucumán.