“Nos vamos a tomar una pequeña licencia por seis meses en el primer torneo. Además decidimos crear una Subcomisión de Fútbol que analizará los pasos a seguir una vez que se cumpla dicho plazo”, comentó Pigerl.
Esta no será la primera vez que un club pide a la Liga autorización para no jugar. Ya lo habían hecho anteriormente El Brete, Itatí y Crucero del Norte, entre otros.
Mientras tanto, el Consejo Directivo de la entidad madre definía en su reunión la fecha de inicio y el formato del próximo torneo del ascenso. Según trascendió, el certamen, que se iniciará a fin de mes, se jugaría de la misma manera que el año pasado, es decir unificado, en el que competirán los elencos de las categorías B y C.
En la reunión pasada se adelantó que se sumarían dos o tres clubes al ascenso, pero eso está en análisis, ya que los clubes que quieren jugar en la entidad deben cumplir una serie de requisitos para poder lograr el permiso precario.
Así las cosas, en principio, la nómina para el torneo de este año estaría conformada por Colectiveros, Argentinos Juniors, 1º de Mayo, Garupá FC, Atlético Itatí, Garupaense y Deportivo Roca.