¿Qué sucede cuando se juntan un escritor, un dibujante y un director de cine a darle forma a una idea? La respuesta: una versión distorsionada de un cuento escrito por Sebastián Borkoski: “Cetrero Nocturno”.
Es cierto que la creatividad no tiene límites. También es que la única forma de poder llevar a cabo los emprendimientos creativos es sumando fuerzas entre diferentes frentes para que el producto final resulte atractivo. “Cetrero Nocturno”, es una clara muestra de todo lo antes mencionado.
La literatura siempre fue el medio por excelencia para contar historias, el trazo del dibujante hace lo suyo, se encarga de darle una representación icónica al relato. A todo esto, cuando la imagen cobra vida, no sólo se potencia a estos dos componentes, se convierte en algo más que encontrar un nuevo formato para difundir una obra.
A esto está evocado este tridente creativo, el escritor Sebastián Borkoski, el dibujante Maco Pacheco y el realizador audiovisual Elián Guerin. Los dos primeros ya se conocen desde hace un tiempo. Pacheco fue el encargado de ilustrar el libro de cuentos “Diablos blancos” (2016), y algunos cuentos breves publicados en medios digitales locales. La relación entre este escritor y Guerin se dio gracias a la última serie “Urú y otros relatos de la Tierra Roja” (2017), una adaptación de los relatos escritos por Sergio Alvez en su libro “Urú” (2016). Borkoski había visto la serie y gracias a los círculos sociales cercanos, conectó con Guerin y le entregó ejemplares de sus obras publicadas.
Esta acción derivó en el principio de la historia, primero se juntaron para participar de una convocatoria realizada por el Fondo Nacional de las Artes denominada Beca Creación, la cual obtuvieron el año pasado. Este premio los incentivó para seguir desarrollando el proyecto que derivó en formato de un guion para cortometraje. El mismo, fue premiado por el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) en la categoría “Cortometraje de animación regional” para la realización íntegra de un cuento adaptado en 2D. Cabe destacar que este proyecto es el único que representará a nuestra provincia en este concurso nacional.
“Cetrero Nocturno”. Una visión distorsionada de un cuento de Sebastián Borkoski: un sereno y un pájaro son cómplices inesperados en una serie de hurtos y robos de joyas. Así lo explica la sinopsis de lo que vendrá.
Para Guerin esto no es sorpresa, los antecedentes en su currículum dan fe de que llevar la literatura a otros planos comunicacionales es factible. Primero fueron la adaptación en murales de los cuentos de Horacio Quiroga con el proyecto multimedia “Muros de Amor, Locura y Muerte”, luego llegó la serie “Urú y otros relatos de la Tierra Roja”, para así seguir su curso con el relato de un escritor local. Según cuenta el realizador, sin hacer comparaciones, lo que le cautivó fue la manera de narrar historias universales contadas en un contexto local. Esta facilidad hace que la historia no sólo pueda ser interpretada en nuestro lugar, sino que cualquier espectador se puede sentir identificado por lo que ve.
Por su parte, Maco Pacheco explicó la sinergia creativa que se generó al trabajar en conjunto: “A diferencia de los libros, en la que recibís ya un texto cerrado, un guion de cine es una historia viva, que va cambiando a cada paso, a cada decisión. Se va construyendo entre el director y en este caso, el animador. Trabajar con Elián te da esa libertad, podes imaginar caminos que ni pensabas”.
Trabajo
Con la idea de que este cortometraje tome el impulso necesario en poder ser reproducido en la mayor cantidad de pantallas nacionales e internacionales, se está trabajando con distintas estrategias de marketing y comunicación para que el vuelo del Cetrero sea verdaderamente universal.
El origen de Cetrero
La historia del origen del libro y sobre todo la inspiración en la cual el autor se basó para escribir este cuento merece ser contada una vez más. Según cuenta Borkoski esta publicación se relaciona con el impulso de una de las grandes plumas que nos ha dejado este lugar: Olga Zamboni. Ella fue la artífice de que “Cetrero Nocturno” (2012) cobre vida.
Precisamente este cuento tiene una mezcla de un recuerdo y una vivencia. Ese recuerdo lo lleva hasta los tiempos compartidos con su abuelo, él tenía un pájaro de las mismas características de Marconi que lo acompañaba a todos lados. En uno de sus patrullajes por la selva, Borkoski se cruzó con distintos hombres que cuidaban diferentes lugares que estaban alejados del ruido y las luces de la civilización. Fue a partir de esta experiencia que se imaginó cómo sería la vida de quienes pasan todos sus días y sus noches rodeados de tanta naturaleza.