
El Ingenio Azucarero de San Javier ya empezó a recibir la materia prima y se prevé moler unos 60 millones de kilos de caña de azúcar.
La molienda comenzó hace un par de semanas y se está desarrollando dentro de los parámetros normales. Las autoridades de la fábrica todavía no decidieron qué porcentaje finalmente resultará de azúcar y cuánto se destinará a producción de alcohol. La resolución se tomará en los próximos meses.
Por lo general, la cosecha de la materia prima se extiende en el período entre junio y octubre, y se estima que este año no será la excepción, aunque hay expectativas de concluir antes de esa fecha.
El actual gerente de la fábrica, Raúl Díaz, comentó este viernes a PRIMERA EDICIÓN que “estimamos que vamos a procesar unos 60 millones de kilos en esta zafra”.
Agregó que podría “haber sido un poco más”, pero consideró “una cantidad aceptable para el funcionamiento de la fábrica”.
Admitió que “estaba previsto que la zafra empezara el pasado lunes 3 del corriente mes, pero algunos desperfectos en el motor hicieron que se postergara por unos días más”. Alertó que esa falla ayudó para poner a punto otras partes de la planta “como ser las calderas y la bomba de la toma de agua, lo que nos permitió reducir costos”, contó.
Los cañeros deben obtener turnos para entregar su cosecha y, en este sentido Díaz relató cómo es la operatoria: “Las primeras cañas que se cortan son las más bajas, así se evita que terminen siendo quemadas por las heladas; luego se sigue con las plantas medias y altas”.
Cabe recordar que el productor entrega su materia prima y el cobro es por sistema bancarizado. La caña de los productores llega a la balanza de la planta con autorización y remito expedido por los inspectores del Departamento Agrícola del Ingenio. Se pesa y se da entrada. La carga tiene un seguimiento hasta el momento de molienda.
Luego se evalúa su calidad a través de análisis del contenido de azúcar y se cargan los datos al sistema informático para posteriores cálculos de fábrica y liquidación al cañero. Una vez que la materia prima ingresa a la fábrica, se la somete a las distintas etapas del proceso, que consta de la molienda y separación del bagazo y el jugo; clarificación y evaporación del jugo; cocimiento de la meladura; centrifugación, secado, envasado y almacenamiento del azúcar.
Al productor se le abona por peso de caña y por dulzura (contenido de azúcar) mediante una fórmula matemática. En este sentido, el precio acordado en la paritaria cerró en 1.650 pesos por tonelada más la dulzura, “que corresponde a un porcentaje proporcional que se logra gracias al análisis en el laboratorio. Teniendo en cuenta este punto, el cañero podría recibir casi unos 2 mil pesos por tonelada de su producción”, señaló Díaz.
Acreedores
Díaz se hizo cargo de la Gerencia de la fábrica en marzo pasado y una de las principales directivas que recibió fue “tratar de poner en orden todas las cuentas del Ingenio y estoy en ese proceso”, aseguró.
No obstante, afirmó que “todas las semanas nos vamos enterando de nuevos acreedores, tanto de azúcar como de alcohol. Queremos cumplir con todas las personas o firmas que acrediten, con documentaciones, tener alguna acreencia de parte de la fábrica”.
Finalmente aseguró que en la presente zafra se van a extremar los controles de calidad, “para que la fábrica siga produciendo y funcionando sin tantas inversiones de dinero”, dijo y consideró que las máquinas podrán soportar el procesamiento previsto.