El objetivo fue, además de lo netamente deportivo, la concientización ya que la jornada se corrió para conmemorar el “Día Internacional del Donante de Sangre”.
Un grupo no muy numeroso de atletas se dio cita en el paseo para participar de la prueba y sobre todo colaborar con la donación de útiles escolares, pues no hubo que abonar la inscripción.
Las distancias que recorrieron fue de 5 y 10 kilómetros, en las categorías comprendidas por las siguientes edades: 13 a 17 años, 18 a 29, 30 a 39. 40-49, 50- 59 años y mayores de 60 e Interfuerzas.
Los resultados fueron una cuestión casi anecdótica, ya que la jornada dejó en claro la importancia de hacer deportes. Alguien calificó, hace algunos años atrás, que el correr te otorga una inexplicable sensación de libertad, que sólo el que la experimenta regularmente puede llegar a dicho estado.
Muchas personas, sin ser atletas competitivos, también pueden sentirlo. El objetivo del deporte, más allá de su costado competitivo, sirve para mejorar la calidad de vida, que en definitiva es el mejor premio al que se puede acceder.