Oberá mantiene un desborde en cantidad de cuadros respiratorios y la demanda en el sector internación es muy alta. Situación parecida se reporta en los hospitales Samic de Eldorado y Gardes, en esa misma localidad, y el Samic Iguazú.
“En esas zonas, con respecto al año pasado, los casos se han duplicado”, dijo a PRIMERA EDICIÓN el responsable del Programa de Infecciones Respiratorias Agudas Bajas (IRAB) en Misiones, el médico pediatra Guillermo Rolón.
“Con respecto a la ocupación de camas sigue siendo alta en el Hospital de Oberá, donde hay 22 camas pediátricas, de las cuales 18 están ocupadas con pacientes que cursan cuadros respiratorios”, graficó el pediatra.
En Eldorado hay un reporte semanal de 133 casos, el Gardes con 54, e Iguazú 114, graficó Rolón.
“En la sala de situación, los reportes de diagnósticos en adultos son relativamente bajos en comparación con los casos pediátricos”, fue la explicación del médico al ser consultado por la franja etaria donde hay mayor impacto de contagios.
Se explayó el pediatra: “El virus influenza (A y B) tiende a permanecer, pero en esta curva es relativamente baja y seguimos con la tendencia de mayor pico en los resfríos. Además los casos que se han registrado no fueron agresivos”, dijo.
Si se comparan los casos de 2018 con los de este año, los números ya están duplicados, aunque no tan altos como 2017, que fue un momento con mayor pico y se llegó a superar las 400 consultas semanales de personas enfermas.
“Nuestra estimación es que la situación va a durar un poco más y luego, en la semana 29, comenzará a aplanarse”, sostuvo.
“Estamos cursando la semana 27 y ese achatamiento en la curva -que estamos seguros va haber- nos coincide siempre con las vacaciones de invierno y creo que a partir de allí también van a empezar a disminuir los casos y ya no se notarán diferencias tan bruscas como ahora”, aseguró.
Incidencia del clima
“Estamos en condiciones de observar que nuestros gráficos muestran variables muy distintas a los registros en años anteriores. La que tenemos este año es una curva en zig zag: en la semana 23 tuvimos un pico con 330 casos en el Hospital de Pediatría, que luego bajó a los 202, posteriormente subimos a 235 y ahora en la última semana, que es la 26, nuevamente tenemos 205. Es un sube y baja y creemos que tiene que ver con el comportamiento del clima”, fue la respuesta de Rolón sobre la posible relación de los cambios bruscos de temperatura con el registro de los cuadros.
Para el médico es notable como se pasa de temperaturas de verano mayores de 30 grados, a otra invernal de 7 grados, en un margen de 24 a 48 horas y “eso es un cambio de clima muy abrupto”, analizó el pediatra.
“Otra cosa que se da ahora y nunca tuvimos es esa curva tan abrupta de subidas y bajadas en la cantidad de cuadros. Hace algunas semanas hicimos un análisis en profundidad para tratar de ir relacionando la curva, y notamos que la mayoría de casos no están relacionados con el frío, si no con esa ecuación nublado, frío, lluvia y calor”.
Para Rolón el estado del tiempo tiene mucho que ver con la parte virológica : “Cuando uno se encierra en los lugares de trabajo, las escuelas, por la lluvia o el frío, hay más incidencia de casos”.
“Aunque cueste, los días fríos hay que hacer una ventilación cada tres horas y higienizar espacios donde hay alguien con tos, porque con estos días como estamos teniendo también se reactivan con los cuadros, sugirió como medida preventiva”.