Los 13 frentes y partidos políticos que se presentan hoy a las urnas misioneras con precandidatos, se juegan “el pase a octubre” si logran superar el 1,5% de los votos válidos emitidos. No parece, inicialmente, una cifra importante de alcanzar. Sin embargo, quedó demostrado desde la implementación de la ley que creó las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), que siempre hay sectores que no lo logran.
Pero, las cartas están jugadas desde el viernes pasado a las 8, cuando comenzó a regir la veda electoral. Aun cuando muchos siguen militando por las redes sociales más conocidas y los mensajes de WhatsApp, pensando que podrán cosechar más adhesiones para sus precandidatos.
Es que la pelea política no es menor, si se mide la porción de poder que se disputa en este proceso que se inicia hoy hasta el 27 de octubre (con posibilidades de ir a ballotage en noviembre). Están en disputa entre todos los argentinos nada menos que la Presidencia y Vice de la Nación; unas 130 bancas en la Cámara de Diputados de la Nación; y 24 en el Senado. Para alcanzar alguno de esos cargos hay que, previamente, conseguir la candidatura oficializada en votos con las PASO.
En Misiones se ponen a consideración del electorado cuatro bancas en la Cámara baja nacional desde las PASO hasta octubre; y solamente un espacio se juega hoy una interna: Juntos por el Cambio (UCR-PRO-puertismo) tiene tres listas en juego.
Los demás sectores políticos van por el 1,5% de los votos de aval para sus precandidatos. Por esa razón, en la mayoría de los municipios misioneros, no habrá movilización comparado con el aparato que se puso en marcha en junio pasado cuando se votó la Gobernación provincial, 76 intendencias y decenas de concejalías.
Por esta razón se habla de “la gran encuesta” a la que se someterán los precandidatos en todas las categorías. Especialmente, entre quienes compiten por la Presidencia de la Nación.
A todos (ganadores y los que vayan por detrás en porcentaje de votos conseguidos) les servirá para revisar las estrategias y los discursos marketineros, las sociedades electorales. En definitiva, las decisiones tomadas ante cada elección.
Así, la dirigencia política tiene hoy también un desafío de supervivencia y de poder; de sostener los partidos activos para seguir manteniendo las estructuras, elección tras elección, con hombres y mujeres capaces de obtener o retener una porción de ese dominio a repartir.
Un objetivo que no sólo deben superar los que figuran en las listas sino, además, las conducciones políticas y quienes simpatizan ideológica o por conveniencia con esos espacios.
Los otros retos
Sin embargo, no todos los misioneros o argentinos están detrás de los cargos electivos políticos. Una gran mayoría observa expectante los resultados de cada elección pero, a la vez, atraviesa por desafíos cotidianos mucho más difíciles de superar: alimentación, trabajo, educación, salud, servicios básicos, vivienda digna, por citar algunos.
Más allá del fuerte rechazo que la mayoría tiene hacia la política, muchas de esas disputas que deben enfrentar, citadas anteriormente, dependen de las decisiones políticas que se toman desde el poder, un instrumento que se construye a partir del voto de cada elector. Así funciona la democracia desde hace 36 años.
En este sistema la dirigencia implementa medidas y, cualquiera sean los resultados, los ciudadanos se las deben ingeniar en soledad para vivir con ellas, especialmente si el impacto es negativo. Con cada elección, se muestra lo importante que es participar y elegir a quienes consideramos los mejores representantes capaces de generar respuestas a las necesidades que tiene la sociedad.
Los oficialismos (construidos por la mayoría de los votos) y las oposiciones (determinadas por los restantes sufragios) son -por los siguientes cuatro años- quienes pueden ayudarnos o complicarnos la superación de las metas personales o familia que se fijan día a día, mes a mes.
A simple vista parece que “la política” y los que no participan de ella tienen desafíos diferentes. Pero no es así. Las PASO, las Generales o los ballotages van construyendo desafíos comunes y otros paralelos que influyen entre sí. Por eso, la peor decisión que se puede tomar es no ir a votar.
Fuera del top ten de exportadores agrícolas
México desplazó de los 10 primeros exportadores de productos agrícolas a la Argentina, según lo informó la Organización Mundial del Comercio (OMC) en su último informe, en base a datos de 2018.
Hay analistas que lo atribuyen a la sequía como a las importantes lluvias que afectaron la producción del año pasado. Con la confianza de volver a ese ranking a partir de la cosecha récord que se tuvo este año, de 147 millones de toneladas.
Sin embargo, otros especialistas advierten que hay muchos factores que pueden influir (en positivo o negativo) sobre los resultados: impuestos (retenciones), la política cambiaria (con un dólar que incentive a los exportadores a vender), entre otros.
Precisamente con una cosecha récord, de acuerdo al INDEC, las exportaciones del primer semestre crecieron 2,4% frente al mismo período del año anterior. Eso significa que los grandes exportadores están reteniendo los granos en los silos y no liquidan las ventas, posiblemente por el precio que el dólar mantiene actualmente, aun con las fluctuaciones alcistas que mostró esta semana previa a las PASO.
Otro dato, revelado por el Gobierno, fue que los precios de las exportaciones registraron en el primer semestre una caída de 7,3%. Si se tiene en cuenta el segundo trimestre, el índice se redujo un 10,4% en la medición interanual.
Hubo varios bloques de países que le compraron menos a la Argentina en este primer semestre de 2019. Las exportaciones al MERCOSUR sumaron US$ 6.135 millones, con una baja de 8,4%. La Unión Europea le compró a la Argentina US$ 3.851 millones, 14,9% por debajo del primer semestre de 2018. El NAFTA (EEUU, Canadá y México) importó de la Argentina por US$ 2.731 millones, que implican una baja de 9,4%.
A diferencia de estos, las exportaciones a China (incluyendo Hong Kong y Macao) crecieron, en cambio, 27,5% alcanzado un volumen de US$ 2.365 millones.
Electos con agenda propia
A medida que avanzan los meses, los intendentes electos el 2 de junio en Misiones (sin los reelectos en el cargo) van consiguiendo información del estado de las finanzas municipales. Por ello, varios de ellos comenzaron esta semana a pedir reuniones con funcionarios provinciales.
Entre los temas que quieren comenzar a poner en agenda, están el pago del aguinaldo cuando les toque asumir (algunos ya saben que recibirán un déficit financiero o cuentas en cero). Saben que la coparticipación les servirá para cubrir sueldos pero no les alcanzará para el medio aguinaldo.
Luego están las obras públicas que podrán hacer, siempre con financiamiento provincial o nacional, ya que los presupuestos que les dejarán no cuentan con los recursos suficientes para financiarlas.
En algunos de los casos consultados por este Diario, también pondrán en la discusión política los pedidos de auditoría de las gestiones que se van, en particular cuando se suceden entre renovadores enfrentados internamente.
En la Rosadita, previendo la avanzada de los jefes comunales electos, ya adelantaron que no podrán dar muchas respuestas hasta que el Presupuesto 2020 sea sancionado por la Legislatura (esto ocurriría probablemente en octubre). Y resaltaron la predisposición a dialogar y buscar herramientas que permitan un inicio lo más ordenado posible para los futuros alcaldes.