
En pocos meses culmina el contrato de la empresa privada que administra la hidrovía Paraná-Paraguay, que es una ruta fluvial que inicia en el vecino país y continúa por Argentina, por la que circulan millones de toneladas de granos y otros productos al año, que van destino a los puertos para luego ser dirigidos a todo el mundo.
Misiones, Corrientes y otras provincias costeras, desde hace muchos años ven pasar ese negocio enfrente de sus narices sin poder tocar un solo peso. Hubo numerosos pedidos y planteos para formar parte de la administración. El último reclamo firme lo hizo el ministro de Industria de Misiones, Luis Lichowski.
Ahora se reactivó la expectativa con la promesa del presidente electo, Alberto Fernández, de entregar la concesión a las provincias. Esto, a pesar de que hay numerosas empresas gigantes de todo el mundo interesadas en el negocio.
El miércoles, en la Legislatura de Santa Fe, el presidente dijo que la Hidrovía Paraná-Paraguay, cuya concesión vence en 2021, pasará a manos de las provincias “que tienen la hidrovía y usan la hidrovía”.
Fernández estuvo en la jura del nuevo gobernador, Omar Perotti, y en esa ocasión se anticipó en tratar uno de los puntos álgidos para el complejo agroexportador, que es el destino que tendrá la red fluvial por donde se despachan casi el 80% de las exportaciones.
En 2021 vence la concesión que está en manos del consorcio integrado por el empresario radical y dueño de Emepa, Gabriel Romero y el gigante belga de dragados Jan de Nul desde hace más de 25 años.
El tema es de fundamental trascendencia y trata de un recurso estratégico para el país. Fernández así lo entendió y fue el único asunto puntual que tocó en los pocos minutos que duró el discurso que ofreció a la Asamblea Legislativa de Santa Fe.
“Lo que más hablamos con Omar es que la hidrovía sea gobernada por las provincias que tienen la hidrovía y usan la hidrovía”, dijo. No dio detalles pero significaría que la administración, mantenimiento y prestación quedaría en los distritos.
De ser así, significaría ingresos multimillonarios para las provincias donde están establecidos los principales puertos. Sin embargo, Fernández aclaró inmediatamente que los recursos obtenidos serían coparticipables con la Nación.
Misiones está a tiro de poner su puerto en funcionamiento. El lunes se habilitó por decreto nacional y sólo falta resolver algunas cuestiones de logística y operatividad.
Reclamo misionero
El ministro de Industria y titular de la Administración Portuaria Posadas-Santa Ana (APPSA), Luis Lichowski, fue varias veces portavoz del Gobierno de Misiones para solicitar a la Nación que se debe priorizar al transporte fluvial como herramienta fundamental para la competitividad y solicitó que las provincias puedan administrar la hidrovía.
En este sentido, solicitó a la autoridades nacionales que Posadas y el nuevo puerto sean incluidos.
“La hidrovía transcurre por el río Paraná hasta la desembocadura del Paraguay y allí continúa por el río Paraguay hacia el norte y luego por el Pilcomayo, pero podemos observar que el río Paraná desde la confluencia con el río Paraguay no forma parte, con lo que queda excluido el río Paraná en el tramo desde Corriente hasta Puerto Iguazú. Los puertos de Misiones sobre el río Paraná se encuentran así en un área adyacente a la hidrovía, pero no dentro del trazado de la misma. Nuestra inclusión es esencial porque la hidrovía es un proyecto que busca garantizar la navegabilidad y con tareas como dragado y balizamiento, podemos garantizar transportar carga con seguridad y eficiencia”, explicó.
“Esto es vital porque gracias al dragado cada centímetro que el buque puede tener de profundidad es mayor cantidad de carga que repercute en los costos comerciales. Claro que la decisión de un nuevo tramo de la hidrovía necesita una resolución de todos los países integrantes, pero para Misiones es sumamente importante impulsar esta medida”, destacó.
¿Qué es la hidrovía?
Es un Programa definido sobre la base de una estrategia de transporte fluvial a los largo del sistema hídrico del mismo nombre, en un tramo comprendido entre Puerto Cáceres (Brasil) en su extremo Norte y Puerto Nueva Palmira (Uruguay) en su extremo Sur.
Los países que comparten este sistema fluvial -Argentina, Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay crearon el Comité Intergubernamental de la Hidrovía (CIH), a través del cual celebraron diversos convenios con organismos internacionales (BID, FONPLATA, PNUD, CAF) para la ejecución de estudios sobre la explotación comercial.