En una medida que apunta a combatir con el mercado informal, el Banco Central prohibe a los extranjeros comprar dólares en el mercado de cambios.
Hasta ahora, en el marco del cepo cambiario, los no residentes estaban habilitados para adquirir hasta 100 dólares por mes, el doble de lo permitido a los argentinos en el exterior.
Sin embargo, la nueva normativa, aprobada por el Directorio y formalizada a través de la Comunicación A6855, dispone que “el acceso al mercado de cambios por parte de clientes no residentes no incluidos en los incisos 3.12.1. a 3.12.4. del presente punto, requerirá la conformidad previa del BCRA para la compra de moneda extranjera”.
Lo que busca el organismo con esta medida es desactivar la red de “coleros” que operaba en su mayoría con extranjeros, que compraban dólares en el segmento oficial para luego venderlos en el mercado paralelo.
Esta situación se daba con frecuencia no sólo en las calles del microcentro sino también en las ciudades limítrofes.
El modus operandi de esta red era el siguiente: buscaban “coleros” que presten su DNI para comprar hasta 100 dólares, a cambio de una comisión.
Lo que ocurría muchas veces, sin embargo, es que algunos coleros conseguían comprar más de 100 dólares en un día para luego quedar inhabilitados para operar en cambios.
Esto lo hacían aprovechando que los bancos recién al final del día informan al BCRA sobre los movimientos cambiarios, con lo cual llegaban a hacer más de una operación en distintas entidades, más allá de que después quedarían inhabilitados.
Con esta normativa los extranjeros directamente no van a poder comprar ni un dólar en el mercado de cambios oficial. El BCRA buscó cortar de cuajo esta operatoria en lo que fue su primera medida que -aunque sea de manera indirecta- apunta contra el mercado informal de dólares.
En su edición de ayer PRIMERA EDICIÓN había dado cuenta de la “fiebre del dólar” que la semana pasada contagió a los argentinos antes de que entrara en vigencia este impuesto. Como la restricción no alcanzaba a los extranjeros, en Posadas y otras ciudades limítrofes se espera una masiva afluencia de ciudadanos paraguayos y brasileños para comprar divisas extranjeras.
El interés que tienen es que los extranjeros “que residen en las zonas fronterizas” no abonarán el impuesto del 30%. Al menos era así para una de las casas de cambio que operan en Posadas. “Informamos que las personas humanas no residentes (Paraguay y Brasil) no pagan el impuesto del 30% por las compras de moneda extranjera que realicen”, detallaron desde la firma.
Posadas es uno de los puntos del país donde más movimiento comercial se registra en las casas de cambio.