
Dos días después que su madre denunciara su desaparición, la adolescente Milagros Ayelén Silva (15) fue encontrada muerta este domingo último en el cauce del arroyo Chimiray. Las dudas sobre la causa de su deceso motivaron que su cuerpo fuera sometido a una autopsia. Lo que llamó la atención a los investigadores y a las autoridades judiciales era que presentaba un golpe en la zona de la cabeza.
La joven era de Colonia Liebig, localidad correntina lindante con Apóstoles y separada por el arroyo antes mencionado. Como el cadáver había sido hallado dentro de los límites de Misiones, tomó intervención el Juzgado de Instrucción 4, a cargo del magistrado Miguel Ángel Faría, quien ordenó que fuera trasladado a Posadas para el peritaje forense.
En el caso se manejaban diversas hipótesis, pero el resultado de la autopsia iba a ser clave para saber cómo ocurrió la muerte de Milagros Ayelén Silva.
Ayer por la mañana estuvo listo el informe forense y en éste se especificaba que el cadáver tenía una “herida escoriativa en la zona frontal medial” (un raspón en la frente) además de mordeduras de peces. Por otra parte, los forenses dictaminaron que la causa de muerte fue “asfixia por ahogamiento”, con una tiempo probable de deceso de entre 48 y 72 horas.
Con estos resultados, en principio la Justicia investiga el hecho como un suicidio. De cualquier manera, según pudo saber este Diario de fuentes consultadas, la UR-VII se encargará de la parte pericial del caso, mientras que sus pares de Corrientes trabajarán en lo que tiene que ver estrictamente con las averiguaciones en el entorno familiar de la adolescente.
Cabe recordar que el domingo por la tarde, unos ocasionales transeúntes divisaron el cuerpo semisumergido y atascado entre las ramas de los árboles que crecen a la vera del arroyo. Con ayuda de efectivos policiales y bomberos de la UR-VII, fue sacado de allí. En principio fue revisado por el médico policial, quien dictaminó un golpe contuso cortante en la frente. Además, había señales de maceramiento, por lo que estimó que había estado sumergido en el agua al menos durante dos o tres días.
La cercanía del lugar de hallazgo hizo que de inmediato dieran aviso a la comisaría de Liebig, porque podía tratarse de la adolescente que era buscada. Su madre se hizo presente y reconoció el cuerpo como el de su hija.
Según trascendió, Milagros Ayelén había sido madre hacía sólo tres meses.