Un comienzo a pura velocidad tuvo la legión misionera en el arranque de una nueva temporada del Turismo Pista, en el autódromo de Buenos Aires. Allí se destacó Tomás Sniechowski, quien ganó la clasifica de la Clase 3 y se quedó además con la serie más rápida de la divisional. Hoy largará primero en la final.
El representante de Apóstoles se hizo fuerte al mando del Ford Fiesta Kinetic preparado por Lucas Benincasa y Ariel Guerini, y pese a que llegó ajustado con el presupuesto e incluso aseguró que su participación durante todo el año no está aún confirmada, logró anotarse entre los favoritos en el Oscar y Juan Gálvez.
Tomy marcó el ritmo en la clasifica con una mejor vuelta de 1m30s907/1000 para completar el trazado 8 del mítico circuito, de 3.337 metros de longitud. Más atrás quedaron Tomás Fineschi y Pablo Vuyovich, mientras que Rudi Bundziak (Nissan March) fue sexto.
Y para demostrar que aquello no fue una casualidad, Sniechowski volvió a imponerse en la primera serie de la Clase 3, que además resultó ser la más rápida. El de Apóstoles le sacó más de dos segundos al escolta Nicolás Bulich y largará primero hoy en la final. Allí, en las series, Rudito también dio que hablar y fue segundo en la segunda, por detrás de Tomás Fineschi, a apenas poco más de un segundo.
Respecto a la Clase 2, la clasificación quedó en manos del mendocino Tomás Vittar, quien marcó terreno con 1m33s488/1000, lejos del único misionero de la categoría, el obereño Walter Garay, quien fue 24º. En la segunda serie, el Chevrolet Corsa del Corsi Sport no pudo remontar y fue 14º. En esa divisional, largará en la punta el cordobés Cristian Garbiglia (Chevrolet Corsa).
Finalmente, en lo que respecta a la Clase 1, la monomarca de Fiat Uno, el posadeño Juan Pablo Abente tuvo problemas de motor y no pudo cerrar un buen sábado. Durante la clasificación terminó 14º, con un reloj de 1m38s536/1000. Los inconvenientes no se solucionaron a la hora de las series, ya que el misionero pudo terminar a duras penas la segunda manga, a una vuelta de Daniel Crevatín, el ganador.