Insólito que en medio de la Emergencia Sanitaria y epidemiológica en la que están el país y el mundo, aún haya quienes se resistan a cumplir con las medidas indicadas por protocolo.
Este sábado, una joven de 23 años se presentó en la Comisaría 14ª de Posadas, para exponer que días atrás llegaron familiares de los dueños del local (un restaurante) en el cual ella trabaja, procedentes desde China, quienes habrían ingresado a la Argentina a través de Paraguay, y que luego tanto ella como sus compañeros de trabajo habrían empezado a tener síntomas compatibles con los del coronavirus COVID-19.
También manifestó que sus empleadores no querían que asistieran a atenderse a un centro médico para evitar el cierre de su negocio. Según la joven, en el Hospital de Fátima le ordenaron el aislamiento correspondiente.
Intensifican controles
Según consta en los partes oficiales de la provincia actualizados el sábado, 40 personas permanecen en aislamiento domiciliario, la mayoría de modo voluntario y no se activó ningún protocolo de seguridad en los centros de salud.
El ministro de Salud Pública de Misiones, Oscar Alarcón, recordó que “se están intensificando los controles junto a la fuerza de seguridad y la Justicia para garantizar el aislamiento preventivo obligatorio de las personas que estuvieron en zona de circulación viral notificada por la OMS. No es sólo en supermercados chinos sino cualquiera que no respete. En caso de supermercados se trabaja en conjunto con la Municipalidad para su cierre preventivo pero si fuera atendido por personas que deben estar en aislamiento también la prevención alcanza a los empleados que hubieren estado en contacto con ello”.
Hasta el momento desde el ámbito de Salud no se ha procedido a un aislamiento que incluya a empleados de comercios con circulación de la enfermedad.