La industria del mueble y la madera elaboró un planteo particular con medidas que reclama al Gobierno nacional para salir adelante después del acuartelamiento.
Este sector depende principalmente del consumo interno y ya venía seriamente afectado en el último tiempo. La producción de madera y muebles se contrajo 10,7% en los primeros 10 meses de 2019, según los datos del Observatorio de la Madera y el Mueble liderado por FAIMA.
El 35% de las empresas del sector redujeron su dotación en 2019, siendo el segundo año consecutivo con una magnitud semejante; el 70% de las empresas tuvieron caídas en su producción en 2019 y el 68% mostraron reducción en sus ventas.
“Consideramos imprescindible que se contemple la dramática situación que están viviendo las empresas de nuestro sector, que al no estar autorizadas a operar y producir ven interrumpido su ciclo normal de ventas y cobranzas, pero siguen obligadas a pagar sueldos, impuestos y cargas sociales”, remarcó Pedro Reyna, presidente de FAIMA (Federación Argentina de la Industria de la Madera y Afines), a este Diario.
Respecto a las líneas crediticias, varias empresas que han recurrido a instituciones bancarias han recibido como respuesta que por tener una deuda vigente con AFIP no son sujetos de crédito. Por esta razón reclaman que se reglamente a la brevedad el Decreto 312/2020 PEN del 24/03/20202 para que las empresas puedan acceder a créditos bancarios, aún teniendo deudas con AFIP.
“Con estos antecedentes, ante la repentina e imprevista suspensión actual de la demanda de nuestros productos, las empresas colapsarán por la imposibilidad de cumplir con sus obligaciones en un contexto de ventas nulas si no se toman medidas adicionales en forma urgente que puedan generar algo de alivio”, resaltó Pedro Reyna.
En la misma línea FAIMA pide herramientas desde el BCRA y el Gobierno que permitan un reperfilamiento de deudas de las pymes con tasas de interés no superiores al 12%, evitando una cadena de juicios tanto laborales como comerciales como consecuencia de la falta de ingresos e incumplimiento de compromisos asumidos.
El Banco Central debería instaurar un descubierto automático y obligatorio de los bancos para que los mismos permitan a sus clientes cubrir los cheques emitidos a una tasa preferencial y que no afecte los fondos que las firmas contemplaban para otros objetivos, como el pago de haberes.
Así, dentro del difícil contexto solicitaron la posibilidad de incluir dentro de las personas autorizadas a transitar a los titulares de las empresas para que puedan trasladarse a sus oficinas a buscar los valores para poder cumplir con el pago de sueldos e impuestos.
Extender al 31 de mayo, en principio, la fecha límite de las deudas a incluir en la moratoria, el plazo para adherirse a la moratoria y establecer como fecha de pago de la primera cuota el mes de septiembre.
Agilizar los trámites para acceder de manera exprés al programa de Reprogramación Productiva y como alternativa utilizar el formulario 931 a los efectos de la acreditación de los beneficios que pudieran otorgarse. Prorrogar el vencimiento de los impuestos anuales a octubre para las personas físicas y de las empresas al mes 10, luego del cierre de su ejercicio económico.
Suspender el pago de los anticipos de los impuestos anuales con respecto al ejercicio en curso. Y prorrogar el vencimiento de las cuotas de marzo, abril, mayo y junio de los planes de pago vigente, entre otros puntos.