El presidente Alberto Fernández dispuso una batería de medidas destinadas a alivianar el impacto en el bolsillo de los argentinos quienes están cumpliendo con el aislamiento obligatorio. Una de esas decisiones es el decreto que congela los precios de los alquileres vigentes al 30 de marzo; como así también las cuotas de los créditos hipotecarios e impide los desalojos.
Desde la Federación Inmobiliaria de la República Argentina (FIRA) brindaron su opinión días antes de que se publicara la medida nacional.
Recalcaron -que más allá de la situación- los inquilinos deben abonar los alquileres, pero no descartan que se evalúen casos particulares.
Al respecto, el integrante de FIRA y empresario inmobiliario, Luis Sosa dijo en conversación con PRIMERA EDICIÓN que “desde la Federación lo vemos bien. Creemos que es apropiado este congelamiento por seis meses de la suba de los alquileres”.
Pero advirtió que “esto no significa que no se pagará. Los alquileres se deben abonar, eso hay que resaltar”.
En lo que refiere a los pagos que deben hacer los inquilinos este mes, Sosa mencionó que “el misionero particularmente cuida su casa o su departamento. Pero se debe recordar que los pagos se deben efectuar”. Explicó que “no habrá actualización, la cual se realizaba de forma semestral”.
Sostuvo que “al ser un decreto se debe acatar”. Sin embargo, esta medida dejará un impacto en el sector inmobiliario; es así que el empresario mencionó que “ya veníamos con una economía castigada, pero ahora se acentúa”. Y reconoció que “en el interior no sucede lo mismo que en Capital Federal. La diferencia inmobiliaria es terrible”.