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Tras varios rumores y siempre en el marco de la pandemia de coronavirus, la UEFA finalmente adoptó el sábado 29 de agosto como fecha provisoria para la final de la Champions League, torneo que debió suspenderse cuando se jugaban los octavos de final. La sede sería en Estambul, Turquía.
Por el momento no está definido el modo de disputa de lo que resta del torneo, aunque para ello será clave la reunión que sostendrán las autoridades del fútbol europeo el jueves venidero. Por lo pronto, hay tres opciones: la primera, jugar lo que resta como estaba previsto; la segunda, que cuartos y semis se jueguen a un solo partido; y la tercera, acelerar lo que falta de juego para la final y cerrar esos partidos en una semana.
Además, la final de la Europa League se disputaría el 26 de agosto en Gdansk, Polonia, tres días antes de la final de la Champions. La idea con ese torneo sería similar: si no se pueden disputar las eliminatorias a doble partido con ida y vuelta, se resolverían los cruces a un solo enfrentamiento, dado lo apretado del calendario que quedaría por delante.