
El Gobierno nicaragüense ignora las recomendaciones de la OMS y únicamente reconoce 12 casos confirmados de la enfermedad, con tres muertos, y sin transmisión local comunitaria. Entonces era de esperarse que, más temprano que tarde, comiencen las actividades deportivas. Como la velada de boxeo que se organizó y promocionó desde el Estado.
La velada se desarrolló en el Polideportivo Alexis Argüello de Managua y se enfrentaron Robin Zamora y Ramiro Blanco. Hubo público, pero se respetaron las distancias, se usaron mascarillas o barbijos y a cada uno de los asistentes se les tomó la temperatura corporal (los que tenían más de 37º debieron retirarse), y además se limpiaron sus zapatos en una alfombra con cloro antes de ingresar, además de desinfectar sus manos con alcohol en gel.

El resultado es anecdótico. Es más, en una situación normal este tipo de pelea tendría poca trascendencia, pero en el marco de la pandemia, todos los ojos estuvieron en ese cuadrilátero.
Fuente: Medios digitales.