
El drama en la chacra todavía continúa, ya que días atrás se registró una copiosa lluvia en la provincia y una zona damnificada fue la Centro. La gran cantidad de agua caída afectó a los productores ganaderos, quienes comenzaron a tomar previsiones con respecto al forraje y a la suplementación de los animales.
Además, los estanques de los productores piscícolas se desbordaron, lo que obligó a colocar media sombra o algún tipo de contención para que los alevines no se escurran con el agua.
Los titulares de las Asociaciones Ganaderas de la Zona Centro, César Hugo Berg y de Libertador General San Martín, Juan Keller hablaron con PRIMERA EDICIÓN sobre los cuidados de los bovinos y las previsiones para las próximas semanas.
Berg señaló que “llovió mucho en estos días y veníamos con una situación de mucha agua. Eso -sumado al frío y las heladas- genera que la oferta forrajera esté limitada porque los campos y las chacras tienen mucha agua y los arroyos están desbordados”.
“Esperemos que se revierta la situación y que pare la lluvia por unos días, aunque el pronóstico anuncia precipitaciones y frío”. “Esperemos que la inestabilidad climática nos regale un respiro porque los campos están con una capacidad sobrepasada de humedad, encharcamiento y barro”, relató.
En esta línea, indicó que “esto afectará a la productividad, sobre todo en la oferta forrajera”; y agregó que “esto afecta a la capacidad de rebrote que pueda tener el pasto, más que nada en la época invernal”.
El problema con las pasturas “afectará en la crianza y la recría de los animales chicos, y de aquellos que estén con algún problema nutricional”, dijo Berg.
Por esta razón, el ganadero mencionó que “estamos sugiriendo a los productores que tomen recaudos y empiecen a ver alguna suplementación para más adelante”.
Agregó que otra sugerencia es que “quien tenga demasiado cargado el campo realice ventas o traslado”. Asimismo, deslizó que “cuesta que baje el agua, es decir se complica el desagote de los campos y de las chacras, y los animales salen del bajo si pueden”.
El exceso de humedad genera problemas con los cascos y las pezuñas de los bovinos. “La idea es que los productores empiecen a tomar ciertas pautas de prevención”, advirtió.
Por su parte, Keller especificó que en la zona de San Martín hay dos tipos de productores ganaderos. Por un lado, están los que alimentan a los bovinos con un sistema de autoconsumo con granos y potrero; y por otro, los que tienen animales a potrero exclusivamente.
Comentó que más allá de las intensas lluvias todavía no se registraron grandes heladas. “Es decir que todavía queda un poco de reserva forrajera y no es desesperante la situación”.
Con respecto a los que alimentan a los animales con granos “están relativamente bien y hay productores que tienen caña dulce para suplementar”, remarcó.
“Muchos productores tienen caña dulce y como las heladas no fueron tan fuertes, algunos cuentan con pata de elefante que es una postura sensible, pero que todavía está bien”, señaló.
Estanques desbordados
Las intensas precipitaciones también generaron problemas a los productores piscícolas de Misiones, ya que varios estanques se desbordaron y esto provocó que los alevines se escurran con el agua. Es así que para evitar grandes pérdidas los piscicultores colocaron media sombra o algún elemento que impida que el pez salga del estanque.
Beatriz Yablonski, de Villa Armonía de Colonia Guaraní, relató a este Diario su situación. “Desbordaron todos los estanques porque las lluvias caídas fueron 218 milímetros en la zona. En ese caso se pone malla encima o lo que tengamos para sujetar; además se saca el agua del arroyo y se deja sólo el de lluvia, pero era tanta cantidad que era imposible trabajar”, describió.
En este punto, remarcó que “la pasamos muy mal y los caños no daban abasto, pero por suerte no reventaron y pudimos salvar todo”.
Por otro lado, explicó cómo afecta esto a la producción. “El agua del estanque tiene plancton y los peces se alimentan de eso; pero al caer mucha cantidad de lluvia lo que sucede es que se lava y el líquido queda limpio; por lo cual se debe tirar comida para que se descomponga y se genere ese plancton”, explicó.
Enumeró que tiene tres estanques con distintas medidas de peces. En uno hay alevines y en otro peces listos para un despesque previsto para la siguiente Semana Santa. “Se habrán ido algunos, pero no sabemos cuántos porque todavía no contamos”, detalló.
La productora también advirtió que “es una situación que genera impotencia porque no se puede hacer nada, sino que se va y no se los puede parar”. Por último, reconoció que “hay que seguir adelante no nos queda otra”.