
Durante mucho tiempo fueron prácticamente los dueños de una de las zonas más codiciadas por los narcotraficantes en Misiones y que por su posición geográfica está a menos de 60 kilómetros de las fronteras de Paraguay y de Brasil.
Se trata del municipio de Colonia Alberdi. Un sector de la Zona Centro con tanto monte -en algunos lugares sin señal telefónica- que favorece la actividad delictiva de los traficantes, ofreciendo rutas de escape y miles de sectores para ocultar los cargamentos de droga.
Finalmente efectivos de Gendarmería, tras un año de investigación que incluyó seguimientos y escuchas telefónicas ordenadas por un juez Federal de San Isidro (Buenos Aires), desarticuló a la conocida banda de Alberdi.
En las últimas horas el Tribunal Federal de Posadas, mediante un juicio abreviado, condenó a los integrantes de esta organización, que fueron detenidos en 2018.
De esta manera sobre el acusado de ser el líder, identificado como René Leiva (32), recayó la pena de cuatro años de prisión como “autor penalmente responsable del delito de almacenamientos de estupefacientes agravado por la participación múltiple”, en tanto que sobre una pareja fueron diversas las sentencias.
El hombre, Héctor Fabián de Almeida (48), recibió cuatro años de prisión como responsable de “facilitación de lugar”, en tanto que la mujer, identificada como Elizabeth Petroski (51), dos años de prisión de cumplimiento efectivo como “partícipe secundaria penalmente responsable del delito de facilitación de lugar”, indicó en su resolución el citado Tribunal.
Si bien los imputados tenían distintos roles, para la Justicia la organización delictiva funcionaba como una sola.
Un año de investigación
El Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional 1 de la localidad bonaerense de San Isidro, en ese entonces a cargo del magistrado Juan Manuel Culotta, investigó a la banda de Alberdi durante un año.
Finalmente del análisis de las intervenciones telefónicas surgió que organizaban las maniobras para realizar el traslado de estupefacientes desde la costa paraguaya hacia suelo argentino en botes, y luego la guardaban o “enfriaban” en distintos inmuebles de la localidad de Puerto Leoni y que funcionaban como depósitos (lugar de acopio).
Posteriormente, las transportaban en vehículos de pequeño porte desde ese lugar hasta camiones. Desde allí, a los principales centros urbanos del país.
La gavilla también operaba con similar modus operandi en Colonia Oasis y en su base de operaciones, Colonia Alberdi.
De las investigaciones se logró identificar a René Leiva, alias “Kavo” como uno de los responsables de colocar las personas de seguridad o campanas a lo largo del camino y rutas alternativas y la encargada de conseguir las mulas para el tráfico hormiga y los choferes para conducir los vehículos con el estupefaciente.
El 13 de enero de 2018, se realizó el allanamiento y registro en el domicilio de Héctor De Almeida y Elizabeth Petroski (identificado en las investigaciones como lugar de acopio del estupefaciente) ubicado en Alberdi, cerca de la ruta provincial 6, donde se encontró en un pinar atrás de la vivienda, una escopeta de fabricación casera sin número de serie con dos cartuchos calibre 20 más cinco municiones calibre 32, y 45 bultos de que arrojaron un peso total de 1.115,345 kilogramos de marihuana. Algunos de los paquetes tenían sensores, que los narcos utilizan para rastrear a la droga en su camino hacia distintos puntos de la Argentina.
En ese entonces Leiva fue avisado del allanamiento y logró escapar, sin embargo fue capturado el 22 de mayo de 2018, en el puente internacional Posadas-Encarnación, cuando intentaba ingresar al país. El juicio contó con la expresa conformidad de los imputados, quienes admitieron su culpabilidad.