Como bailarín, su danza hipnotiza mientras que su técnica lo llevó a destacarse en el Teatro Colón y desde allí, pronto abrió las alas para volar a los Estados Unidos, desde donde conquista escenarios.
Actualmente reside en Nueva York donde es director del Programa de Becas “Latinoamérica Baila” que recorre el continente en busca de talentos. Como si fuese poco, desde el 2018 se dedica al modelaje. Una ocupación que surgió cuando el diseñador Ryan Berkeley lo invitó al New York Fashion Week.
En 2019, la agencia de modelos Taylor Keslaw lo convocó y cuenta que ha “realizado campañas de maquillajes y ropa interior, este año con Polo Ralph Laurent. Además posé para la fabulosa Patricia Field, diseñadora de la serie Sexo en la Ciudad, un diseño que más tarde fue utilizado por Billy Porter, ganador del Emmy”.
Otras de las facetas de Manu es la música. En mayo del 2019 comenzó la producción de “This is The Moment”, su primer álbum como cantante. “Tiene de todo un poco; rock nacional argentino, folclore y pop”. El álbum se estrenó el 10 de julio y ya supera las 100 mil reproducciones en Spotify, lo podemos encontrar en todas las plataformas digitales.
Manu nació en Posadas, un día como hoy pero de 1993. Su historia como artista inició temprano, tenía 9 años cuando comenzó sus estudios en la Escuela de Música.
Paralelamente estudiaba piano con una profesora particular que, con mirada visionaria le anticipó su destino: “Manu, yo te veo en el Broadway”. Por supuesto, Manu no sabía a qué se refería “es que nunca había escuchado hablar de eso”, contó a la revista SextoSentido.
Además de la música y siendo aún un niño, eligió tomar clases de teatro, “donde por primera vez sentí pasión por el ballet”.
En 2009 Manu empezó a entrenar con Marta San Martín, maestra de ballet, con el objetivo de ingresar al Teatro Colón. A su vez fue parte del icónico grupo de hip hop Axe Da Rua, con dirección de Gustavo Escobar. “Con este grupo llegamos a la final en el Programa Talento Argentino”.
Al terminar el colegio decidió ir a Buenos Aires. “Fue difícil pensar en dejar el nido para seguir un sueño a lo ‘Billy Elliot’, como me decían mis maestras”.
En 2010 llegó a la Capital Federal y en pleno verano porteño tomó clases con Olga Ferri. Al año siguiente ingresó al Teatro Colón como alumno regular, después de pasar por una audición de 80 varones, “solamente ingresamos tres bailarines”.
Ya en 2012 ingresó al grupo “La Escena” donde se especializó en comedia musical. Entonces, por la mañana cursaba en el Colón y por la tarde concurría a La Escena. “A finales de ese año me convocaron para el elenco de Violetta, una producción de Disney en la que participé en el videoclip ‘En mi Mundo’, que se grabó en los Bosques de Palermo”.
En 2013 participó en la Fiesta del Litoral junto al Ballet de Luis Marinoni “personifiqué al colibrí en su obra ‘Murmullos y Rituales del Monte’”. A finales del 2014 audicionó para Julliard School de Nueva York. “En noviembre confirmaron mi ingreso a la institución de arte más prestigiosa del mundo, siendo el primer argentino en obtener este honor”.
Sin embargo, en 2015 la situación económica se complicó “y no pude concretar ese sueño”. Pero es aquí donde comienza “mi verdadera historia”.
En diciembre grabó un video y lo envió a distintas instituciones de Estados Unidos: “Recibí varias respuestas entre ellas, del instituto Joffrey Ballet School de Chicago que me ofrecía una beca completa y acepté”.
Llegó a Chicago en enero, nevaba y por primera vez visitaba la ciudad donde vivió por cinco meses, hasta que escuchó que había audiciones para el musical “Los Miserables”, en Nueva York. “Si iba perdía la beca en Chicago. A veces es bueno tomar riesgos”.
En mayo dejó Chicago y “lo primero que hice fue correr con mis valijas a las escaleras rojas del Times Square y cerrar los ojos. Me sentí en casa”.
Tomó clases en Joffrey Ballet School y audicionó para Los Miserables, pero no ingresó. “Sentí que había perdido todo”, la situación lo obligó a regresar al país.
Camino a casa escribió la obra “Otra de Payasos”, que se estrenó en Misiones a sala llena en el Parque del Conocimiento.
Sin embargo, su mente seguía en Nueva York, entonces volvió. Retomó las clases en Joffrey y “fui convocado para la reapertura del Museo de Brooklyn, también bailé para el coreógrafo Sekou Mc Miller en Alvin Ailey”.
En 2017 “estrenamos bajo mi producción y dirección la Obra ‘Falling Angel’ creada en conjunto con el bailarín Andrei Vassiliev, en Nueva York. El argumento de la historia es ‘todos en esta vida tenemos un ángel que llega a transformarnos’, es el camino del artista en su plenitud y su lucha constante para no perder su inspiración”. Y su sueño es “poder mostrar esta obra en Misiones”.
En busca de los sueños
En enero de 2010 “viajamos a Buenos Aires con papá, para mí era un sueño. A la primera clase llegamos tarde pero el destino así lo quiso porque nos encontramos con Enrique Lommi, primer bailarín del Teatro Colón”.
“Mi papá muy misionero le saca charla y recuerdo que lo tutea, a mí me dio mucha vergüenza. Le cuenta que somos de Misiones y le pregunta si ha visitado las Cataratas. El maestro con su bastón señaló una foto y le dijo: ‘viajé por el mundo aunque no tuve el placer de visitar Iguazú’”.
“Luego escucho que pregunta: ‘¿y el muchacho alto quién es?’, señalándome. La sensación fue inexplicable, me temblaban las piernas. Dentro de mí sabía que era un antes y un después“.
“Papá le comentó que venía al curso de verano, para probar alguna beca de estudio y quedarme en Buenos Aires, con el objetivo de audicionar en el Teatro Colón. El maestro me dice: ‘aquí mismo, a ver, primera posición’. La prueba fue corta, le llevó diez minutos decirme: ‘quiero que este lugar sea tu Taj Majal, me gustaría otorgarte 100 por ciento la beca’”.