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Representantes de la foresto industria misionera participaron el miércoles en una reunión del Acuerdo Económico y Social en el Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación, que dirige Matías Kulfas, para impulsar una agenda de trabajo para potenciar el desarrollo del sector.
En ese marco, le hicieron llegar los detalles pormenorizados de la crisis que están atravesando algunas empresas debido a la decisión del Instituto Forestal Provincial (INFOPRO) de fijar precios mínimos para el chip ($1.850) y raleo ($1.600) puesto en planta.
Desde la Federación Argentina de la Industria de la Madera (FAIMA) describieron los impactos que se han generado en las últimas semanas en el sector foresto-industrial debido a las medidas tomadas por el Instituto.
“La fijación de precios de referencia para el chip y raleo trajo consecuencias negativas que ya se observan en el día a día de las empresas, en la dificultad de operación y representan también un peligro medioambiental que no debe ser soslayado”, advirtieron.
En los detalles, explicaron que hay numerosas empresas con los predios totalmente abarrotados de chip que no pueden vender debido a la decisión de las grandes pasteras de dejar de comprar. Es que el Instituto estableció un incremento de 60% en los dos subproductos forestales, mientras que las empresas estaban dispuestas a pagar un incremento de hasta 30%.
Al no vender el chip ni el raleo, los pequeños productores se están desfinanciando y algunas empresas, incluso, advierten que deberán suspender a su personal.
Días atrás, el presidente de la Asociación de Madereros Forestales y Afines del Alto Paraná (AMAYADAP), Román Queiroz, sostuvo que ya comenzaron las suspensiones en algunos aserraderos y que el precio del raleo produjo un incremento de los precios de la madera, lo cual ocasionó una pérdida de competitividad con Corrientes, una provincia que compite con Misiones en el mercado forestal.
En declaraciones a PRIMERA EDICIÓN, Queiroz dijo que hubo una reunión con el ministro del Agro, Sebastián Oriozabala y en la misma se le planteó que “hay una serie de aserraderos que bajaron la producción y suspendieron personal, eso lo sabe el Sindicato. No están consiguiendo madera porque los productores primarios no pueden ubicar el raleo”.
Y agregó: “El precio de la madera subió considerablemente porque al fijar un valor mínimo para el raleo arrastra un valor de los otros cortes para arriba y hay un desfasaje que el mercado nacional e internacional no lo puede pagar”. Como consecuencia explicó que “estamos en desventaja ante Corrientes, por ejemplo, con estos valores”.
Más madera en las pobras
Por otra parte, desde la Federación Argentina de la Industria de la Madera (FAIMA) se planteó al ministro Kulfas la importancia de la construcción con madera en articulación con el plan Procrear; el impulso de la demanda del mueble tanto para el mercado interno como su internacionalización y la búsqueda de regímenes laborales que permitan el empleo de calidad, entre otros.
El presidente de la FAIMA, Pedro Reyna, expresó: “Veo con sumo agrado esta unión, creo que el mecanismo del consenso y diálogo es el único mecanismo para el éxito. Tenemos que trabajar con la expectativa de generar instrumentos para lograr inversiones y empleo, para resolver los problemas que la coyuntura plantea. Apostamos a este puente tendido entre todos los sectores para lograr el crecimiento”.
El ministro Kulfas dijo que “esta es una cadena productiva que tiene mucho para crecer. Hay aplicaciones de la madera que tenemos que fortalecer e incrementar. Hay muchos proveedores nacionales que hoy no tienen oportunidades porque la política nacional no se las ha dado”.
Sectores que participaron
Del encuentro con Kulfas participaron representantes de la Federación de Obreros y Empleados de la Industria del Papel, Cartón y Químicos (FOEIPCQ), la Federación Argentina de la Industria Maderera y Afines (FAIMA), la Asociación de Fabricantes de Celulosa y Papel (AFCP), la Asociación Forestal Argentina (AFOA) y la Asociación de Fabricantes y Representantes de Máquinas, Equipos y Herramientas para la Industria Maderera (ASORA).