
“Un año atípico” fue como definieron a este ciclo lectivo 2020 los docentes y alumnos misioneros. Y es que después de tanta incertidumbre, protocolos, reclamos y puesta en evidencia de la falta de inversión en el sistema educativo provincial, finalmente concluyó el dictado de clases del ciclo 2020 aunque con una libreta aún abierta.
“Fue un año de mucho sacrificio: el docente se cargó la mochila al hombro y pudo responder de manera satisfactoria a pesar de la falta de inversiones”, dijo a PRIMERA EDICIÓN el docente de la EPET 16 de Dos de Mayo, Rubén Vallejos.
Un año atípico
El ciclo lectivo 2020 ha sido, y es todavía, un año excepcional respecto a varias cuestiones: “En cuanto a lo pedagógico, la deficiencia en las conexiones a internet y la falta de recursos hicieron mucho más difícil la tarea de enseñar y aprender en la virtualidad”, dijo Vallejos.
En este sentido, sostuvo que “durante todo el año, el Gobierno provincial apostó por una plataforma que nunca funcionó, por lo que los docentes tuvieron que asumir la responsabilidad de enseñar con sus propios recursos”.
Por otra parte, Vallejos también se refirió a la lucha docente: “Creo que tuvimos un balance más que positivo para el conjunto de los trabajadores de la educación. Comenzamos este año con un salario básico de $5.800 y estamos terminando con un básico de $10.500, fue un histórico e importante aumento del básico”, destacó.
“Se dejaron estar”
Pese a considerarlo un año positivo, la directora del CEP 6 del barrio Fátima de Posadas, Karina Henn, mencionó a este Diario la dificultad de la continuidad pedagógica que atravesaron muchos de sus alumnos. Ya sea porque tuvieron que empezar a trabajar para ayudar en sus hogares o porque no tenían acceso a Internet, “se atrasaron y recién este último tiempo pudieron ponerse al día”.
Es por ello que tanto Henn como Vallejos, destacaron la importancia de las libretas abiertas. “El 50% de los alumnos ya está cerrando la libreta, promocionando e inscribiéndose en el curso siguiente, pero el 50% restante va a continuar con su libreta abierta hasta marzo para tener las instancias de recuperatorio”, dijo la directora del CEP 6.
Según contó, “lo que pasó fue que en noviembre los chicos empezaron a apurarse para entregar las tareas pendientes. Estaban creídos de que la cuarentena iba a durar dos semanas nomás, entonces a comienzo de año se dejaron estar“.
“Otros también se atrasaron por problemas personales o porque se enfermaron o porque tuvieron que empezar a trabajar para poder ayudar en la casa y cuando se dieron cuenta que faltaba un mes para terminar el año, le metieron a full”, continuó.
Dos semanas en el aula
Las últimas dos semanas de clases que el Gobierno provincial autorizó que fueran presenciales para los estudiantes de los últimos años, en el caso de la CEP 6 las tomaron como una oportunidad para dictar tutorías a aquellos que se habían atrasado en las tareas.
Esas semanas “les sirvieron mucho a los chicos para ponerse al día, porque había actividades que no habían entregado y los profesores los ayudaron a terminarlas”, explicó Henn.
En el caso de la EPET 16, “retomamos esa relativa presencialidad para ponerle un fin a este ciclo lectivo, aunque consideramos que fue muy acotada. No tuvo ningún tipo de resultado”,