El Amor es un lenguaje que se acompaña de muchas palabras expresiones y acciones: “Te quiero mucho”, “cuidate”, “te ves muy bien”, “avisá cuando llegues”, “te extraño”, “estaba esperando tu mensaje”, “eres muy importante para mí”, “quiero pasar tiempo contigo”.
Podrían ser sólo palabras, pero los afectos expresados en cada una de ellas nutren el alma y las acciones acompañadas son un incentivo, claro con la premisa que el amor no es perfecto y es en procesos algo complicado,
Si se entiende eso y se aplica el amor en sus palabras, entendimiento y acciones, todo llevará a una conexión afectiva, de aceptación y respeto plagada de muchos matices y sobre todo de comprensión, respeto, mejora continua y unión.
No tengas miedo de las palabras afectivas. Es un mal social de estos tiempos el no querer usar las palabras afectivas por considerarlas “ridículas” o porque para algunos expresan debilidad y poco orgullo.
Pero al contrario, expresan fortaleza y amor hacia uno y a quien se las dice porque estas palabras nos mantienen sanos y nos ayudan a esparcir sanidad en los corazones más lastimados.
Con palabras de Amor y Afecto puedes inyectar fortaleza, motivación, valor, coraje y determinación en las personas que amas. No tengas miedo de ser amable y decir a cada ser de tu núcleo, lo positivo que hay y ves.
No tengas miedo de decirle a tu pareja “te ves hermosa”, “te ves muy guapo” porque tal vez la han herido tanto por su apariencia que ella/él, no se siente así.
No tengas miedo de decir a quien amas “me encanta tu actitud, cómo enfrentas cada problema, aprendo mucho de ti” porque a veces las cosas no son tan fáciles para esa persona y puede sentirse motivada por tus palabras.
Menos crítica y más afecto
La crítica es buena porque nos ayuda a mejorar como sociedad. Sin embargo, estamos tan saturados de críticos severos que nos hemos olvidado de las palabras de afecto, esas que realmente nos motivan para seguir adelante.
Cuando una persona sólo recibe críticas, no importa de donde vengan, no importa si la escudan bajo el “te lo digo porque te quiero” o “porque es lo mejor para ti” no podrá reconocer lo bueno que hay en ella porque su panorama de sí mismo es solo negativo.
Por eso, las palabras de afecto valen oro en estos días donde todos tienen algo que criticar porque las palabras cariñosas aportan identidad a las personas, les dicen lo bueno y valioso que hay en ellas y las motivan a hacer cambios positivos en sus vidas.
Te deseo felicidad para tu vida.