Después de un inicio de año tan seco y con las perspectivas de profundización de “La Niña” para los próximos meses, los problemas de escasez de agua proliferan en la provincia, por lo que se hace necesario cuidar al máximo el vital líquido.
Además, para los afortunados que no tienen problemas de provisión, está también la faz económica, ya que en verano tienden a abultarse las facturaciones que convierten a las boletas de servicio en prácticamente impagables.
Por ello, a continuación enumeramos algunas claves a tener en cuenta para no derrochar agua en los próximos meses:
– Regar las plantas varias veces al día con menos agua es mejor que hacerlo de una sola vez con mucha. Regar al atardecer es mejor, pues las plantas aprovechan mejor el agua.
– La limpieza de autos con manguera puede gastar unos 500 litros. Se puede ahorrar mucho lavando con balde y cepillo, además se consigue un mejor lavado.
– Con respecto a las piletas, se aconseja proceder a su llenado durante la noche, cuando el consumo disminuye, para no afectar la presurización de la red de agua potable durante el día.
– Para mantener la calidad del agua en la pileta por más tiempo, lo mejor es taparla con una lona cuando no se utilice y sólo destaparla cuando se vaya a usar. De esa forma se evita que ingresen insectos, hojas o tierra, que provocan la necesidad del recambio del agua.
– Otra medida eficaz, para mantener el agua de la pileta por más tiempo es lavarse los pies antes de ingresar y evitar arrojar juguetes o elementos que se hayan utilizado en el césped o la tierra, como pelotas o muñecos. También es importante sacar de la pileta cualquier elemento extraño, como hojas, insectos, etcétera.
– Para mantener la desinfección del agua es aconsejable agregarle cada dos o tres días dos gotas de lavandina por litro de agua.
Ojo con las pérdidas
– Cada fuga de agua en su casa puede representar un importante e indeseable aumento en su factura: una canilla que gotea supone el desperdicio de 82 litros de agua; una pérdida constante en el inodoro, 2.500 litros.
– Las pérdidas más comunes (en inodoros, canillas, tanques de reserva) se aprecian a simple vista y se pueden reparar fácilmente. Otras pérdidas (las más grandes y costosas para el usuarios) no están a la vista, como las de cañerías enterradas por ejemplo, pero consultando a un plomero profesional se podrá localizar y repararla.
– ¿Cómo detectar fugas de agua? Asegúrese de que todas las canillas de su casa están cerradas y de que su tanque esté lleno. Después, fíjese en el indicador de funcionamiento del medidor: si está en movimiento, significa que está entrando agua a la casa y es posible que haya alguna pérdida visible o invisible. Si no hay ninguna fuga visible, haga revisar las cañerías en busca de alguna invisible.