En tiempo de pandemia, donde los velorios y despedidas se vieron limitadas, las personas debieron aprender a realizar el duelo de otras formas. Lo que le sucedió a una familia de Córdoba cuando se preparaba para velar a un hombre de 68 años es algo impensado.
Familiares de Abel Moris, que falleció por cirrosis hepática, presentaron una denuncia penal el miércoles 3 de marzo en Tribunales II de Córdoba contra el sanatorio Mayo luego de que le entregaran el cadáver de otra persona haciéndolo pasar por Moris.
Carlos Nayi, abogado de la familia, comentó que los familiares del difunto “contratan a una empresa fúnebre para realizar el velatorio” y que cuando “concurren al Sanatorio Mayo a retirar el cuerpo, se encuentran con que ya había sido retirado con fines de cremación con diagnóstico Covid-19”. Al respecto, sostuvo que éste no era el diagnóstico de Moris y que éste hombre no quería ser cremado.
Por esto, la familia solicitó que, a través de la denuncia, se determinen todas las responsabilidades y que también se investigue dónde está el otro cuerpo con Covid-19.
Una de las hijas del difunto conversó con Cadena 3. Al respecto, comentó que las cenizas no saben si las tiene la empresa fúnebre o quien. “Con el Doctor Nayi estamos averiguando si tienen las cenizas de mi padre, porque ahí va toda la gente a cremación”, relató.
“Mi mamá está destruida, no le podemos dar el último adiós, ni llevar flores a ningún lado. El sanatorio no salió a dar ninguna explicación. Dicen que se equivocaron y nada más y por eso recurrimos a la Justicia, hicimos una denuncia penal”, agregó.
Desde el Sanatorio, por su parte, indicaron que se inició una investigación interna para determinar qué fue lo que sucedió. Algo realmente increíble, que no debería haber pasado, pero pasó.
Fuente: diariofederal.com