La población de Bernardo de Irigoyen está en una situación “muy complicada” en lo que respecta a la provisión de agua potable. La falta de lluvias intensas sumado a la sequía del año pasado que aún deja su huella en toda la provincia, se volvió a secar la represa y los pozos perforados están corriendo la misma suerte.
Arlindo Pianowski, presidente de la Cooperativa de Agua Potable de Bernardo de Irigoyen Limitada (Coopabil) contó a PRIMERA EDICIÓN que hace un mes reparten agua y “es complicada nuestra situación, Irigoyen es un lugar donde hace mucho tiempo venimos con problemas de agua, es un lugar muy alto, acá una perforación siempre es superior a los 200 metros de profundidad para tener un con caudal de agua chico, nuestra represa se construyó hace más de 20 años, para una población chica, y de un tiempo a esta parte hay problemas con las lluvias en la zona norte”
“Además creció la cantidad de usuarios, hoy estimamos que la cooperativa da agua a seis o siete mil familias y fue proyectada para proveer 400-500 familias. Además tenemos toda la estructura de caños, mangueras viejas, con pérdidas de agua y gente enganchada, y se agravó ahora por la falta de lluvias”, dijo.

Contó que se reunieron con el comité de Emergencia Hídrica de Irigoyen que conforman Gendarmería, Ejército, Policía, Bomberos Voluntarios, la Municipalidad y la Coopabil y “a partir de hoy (por ayer jueves) se comenzó a entregar agua en los barrios con los camiones, buscamos un tanque, que nos prestó el IMAs, lo trajimos desde Alberdi, tiene 6.800 litros, está arriba de un camión y vamos por los barrios llevando algo de agua a la gente, pero por la merma de lluvia también tenemos merma en el pozo perforado que todavía está dando agua“.
“Nosotros tenemos 16 pozos perforados en Irigoyen, de esos, sólo tres realmente funcionan que es donde sectorizamos y mandamos agua a todo el pueblo, mandamos un día a un barrio, otro día a otro, y así, pero cuando le vuelve a tocar al primero de los barrios ya pasaron cuatro días y se quedaron sin agua, hay dos o tres barrios complicados que son 300 familias que se quedan sin agua, como Vista Alegre, Cuatro Hermanos, Evita y santa Rita”.
Pianowski explicó que de los tres pozos perforados que la provincia ayudó con las perforaciones, sólo uno se encontró agua “más o menos con caudal suficiente, que lo estamos utilizando ahora, pero de los otros dos, uno se perforó 280 metros y no se encontró agua, el otro 230 metros y tampoco, así que es complicada la situación”, dijo.
Indicó además que “estamos rezando para que llueva este fin de semana, porque esperemos que no se sequen los pozos perforados de donde sacamos para la distribución. El comité se reunirá la semana que viene”, dijo.