
La Comuna posadeña, a través de la Secretaría de Salud, Medio Ambiente y Desarrollo Humano, llevó adelante el monitoreo y control del caracol gigante africano en la chacra 114, en conjunto con el Ministerio de Ecología y el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA).
Los técnicos recorrieron el área en busca de especímenes, a fin de recolectar y realizar la disposición final de los ejemplares denominados científicamente como “Achatina fulica”.
La intervención tuvo como objetivo evitar su dispersión, dado a que es una especie exótica e invasora, nociva para la salud, la agricultura y la biodiversidad posadeña. Puesto que los parásitos se presentan en la baba del caracol, contaminando las superficies por las que circulan.
Desde la Dirección de Cuencas Hídricas municipal precisaron que esta especie tiene hábitos nocturnos y depositan sus huevos en las macetas.
Por ello, es importante eliminar del jardín restos de madera, materiales de construcción, tejas o cualquier elemento que pueda utilizar como refugio.