La primera fábrica de carne artificial ya es real y queda en Rejovot, Israel. La noticia se conoció en las últimas horas y ya impacta a nivel mundial, ya que el objetivo es llegar a distintos territorios para 2022, incluido Estados Unidos.
La planta le pertenece a Future Meat Technologies, una empresa líder en el desarrollo de tecnología del rubro. Actualmente, tiene una capacidad de producción de 500 kilos de carne cultivada por día, lo que representa un total de 5.000 hamburguesas.
No solamente logra “carne” vacuna, sino también de pollo, cerdo y cordero en ciclos 20 veces más rápidos que en la modalidad tradicional. Asimismo, según resaltan desde la firma, la producción es limpia, sostenible y sin OGM (Organismos Genéticamente Modificados).
“A medida que nuestra tecnología avanza, los precios seguirán bajando, haciendo que la carne cultivada sea asequible en todo el mundo”, resaltan desde Future Meat Technologies.
Carne cultivada, precios más bajos
Es que, actualmente, la compañía sería la primera de la industria en producir pechugas de pollo cultivadas a 3,9 dólares, un precio récord.
Además del bienestar animal que destacan, desde Future Meat Technologies aseguran que este método de producción genera 80% menos de emisiones de CO2 y utiliza 99% menos de tierra, lo que ahorraría 96% de agua en comparación con la ganadería tradicional.
Cabe recordar que ya existen cerca de 50 empresas que desarrollan tecnologías para carne cultivada, y que para salir al mercado debe haber una aprobación de las autoridades sanitarias de cada país. El primero en autorizarlo fue Singapur en diciembre de 2020.
Tendencia que crece
El 2 de diciembre de 2020, las autoridades sanitarias de Singapur emitieron una autorización de venta de nuggets de pollo procedentes de la agricultura celular. Este acontecimiento pionero mundial ha provocado muchas reacciones, entre ellas la del ministro de Agricultura francés que afirma que la carne debería seguir siendo “natural” y no “artificial”.
El argumento de la naturalidad es equívoco. ¿Podemos realmente llamar “natural” a la cría francesa? Por otro lado, rechazar una tecnología únicamente por su “artificialidad” no es un argumento válido. El carácter artificial de las vacunas, ampliamente utilizadas en la cría de animales, no las convierte en herramientas menos indispensables y beneficiosas para la salud humana y animal.
En Francia, dos empresas se han embarcado en el desarrollo de la agricultura celular. La empresa Gourmey trabaja en el desarrollo de foie gras cultivado, y la empresa Vital Meat en carne de pollo y pato cultivada.
¿Qué es la agricultura celular?
La agricultura celular permite la producción de productos animales a partir de células en lugar de animales, lo que ayuda a resolver los problemas asociados con la ganadería industrial. Se están desarrollando carnes, pescados y mariscos generados a partir de células, así como proteínas de leche, huevo y colágeno producidas por fermentación.
¿Cuáles son las posibles ventajas e inconvenientes de los productos resultantes de esta técnica?
Estos productos se están desarrollando para ser mejores para el medio ambiente, la salud y el bienestar de los animales.
Deberían producir menos gases de efecto invernadero si se utilizan energías limpias, requerir mucha menos tierra y agua, contaminar menos el agua, luchar contra la deforestación y preservar así los hábitats naturales. Estos productos, además de requerir menos recursos naturales, ayudarán a luchar contra la resistencia a los antibióticos y la propagación de enfermedades zoonóticas.
Por último, no habrá que matar animales en el desarrollo de estos productos. Si estos beneficios potenciales se materializan, si estos productos son adoptados por los consumidores y sustituyen a los de la agricultura industrial (reduciendo así su impacto), y los desarrollan tanto centros de investigación públicos como diversas empresas, sólo vemos ventajas en el desarrollo de esta técnica.