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La presunta involucrada en el robo de 10 millones de pesos en la vivienda del empresario maderero Diego Morawicki logró zafar de dos allanamientos, uno en la capital provincial y el otro en la localidad de Garupá.
En diálogo con PRIMERA EDICIÓN el damnificado, de 44 años, contó que tras enterarse de la presentación de exención de prisión que hizo una sospechosa de participar en el hecho, perpetrado el viernes 14 de mayo a la noche, tiene la certeza de que “se trata de la misma joven que estuvo conmigo mientras me robaron. La contacté en las redes, nos reunimos en mi casa en Garuhapé y mientras salimos a pasear a Puerto Rico ingresaron a mi domicilio y me sustrajeron el dinero y las joyas. Está tan identificada que hasta parece que se cambió el look, pero eso no hará que no la ubiquen las autoridades”.
Luego Morawicki precisó que “hubo dos allanamientos, uno en Posadas y el otro en Garupá, y en las dos ocasiones logró irse antes de que llegue la policía. En uno de los casos estaba un obrero realizando refacciones y le dijo a los efectivos y a la comisión judicial que llegó al lugar que los dueños ‘se habían retirado hace un rato’. Increíble que logró zafar por poco de las autoridades”, relató la víctima del robo a este Diario.
Tal como se publicó en su momento, el empresario fue sacado de su casa mediante un ardid, en este caso una joven que contactó en redes sociales y salieron a dar un paseo, mientras la otra parte de la banda -una pareja- ingresó a su domicilio y se alzó con el botín, consistente en la gruesa suma de dinero (que eran producto de sus ahorros en dólares), cheques y joyas que eran recuerdos familiares.
Esa noche el damnificado salió con la mujer que acababa de conocer durante unos 40 minutos (fueron desde Garuhapé hasta Puerto Rico) y al regresar, ya solo, constató que le arrancaron la caja fuerte que tenía empotrada en la pared en su casa y se habían llevado sus pertenencias.
Si bien la joven que lo había acompañado a salir parecía fuera del contexto del robo, filmaciones demostraron que formó parte del plan delictivo.
Es que en Puerto Rico y luego de que el damnificado la dejara sola, la pasó a buscar alguien en un Chevrolet Onix de color gris, el mismo en el que llegó y salió una pareja de Garuhapé tras consumar el robo. Todo quedó filmado. El accionar de la joven dentro de la vivienda del empresario también.
“Me echó algo en la bebida”
Morawicki, quien tenía planificado instalar un nuevo aserradero en la zona de Garuhapé con el dinero que le sustrajeron, afirmó que al observar las filmaciones del interior de su vivienda notó que la joven, de unos 18 años, le arrojó algo en la copa de champagne.
“Por suerte yo tenía que trabajar temprano y además llevarla a Puerto Rico en mi camioneta, por lo que no podía tomar. Ella fue quien buscó la bebida en la heladera y me ofreció e insistió dos veces para que yo tomara. Al mirar detenidamente las cámaras de seguridad noté que me echó algo, es decir que su intención era doparme”, relató.
Finalmente, Morawicki confió que otra cuestión que le pareció extraña que “un hombre con frondoso prontuario hizo la VTV del Chevrolet Onix utilizado por la banda que le robó, apenas 24 horas antes de cometerse el hecho, y que le dijo a los investigadores que él tras hacer ese trámite vendió el vehículo y que ‘no sabía a quien se lo vendió’”.
Actualmente el automóvil sigue sin ser ubicado.