
Luego de una asamblea en la cual participaron representantes de las comunidades mbya Koejú, Tachy Poty y Tachy Yvychy, se firmó un acuerdo donde se establece la paz y un repudio a todo tipo de agresión hacia a los trabajadores de la empresa CARBA.
Cabe recordar que semanas atrás, los operarios denunciaron que fueron golpeados por integrantes de una aldea cercana al área donde realizan trabajos de extracción de madera y plantaciones.
“Son tres las comunidades que estamos viviendo dentro del predio de esta empresa CARBA y llegamos a un acuerdo por el uso de hectáreas”, contó a PRIMERA EDICIÓN Néstor Morinigo, de la comunidad Koejú de Campo Grande.
Aseguró que “las familias están contentas por este acuerdo y con el accionar de los caciques por el reconocimiento de los propietarios”. Tras esto, la empresa se comprometió a continuar las gestiones para la donación de más de mil hectáreas para uso de las comunidades.
Como parte de la comunidad, aclaró que “no queremos vivir con problemas y buscamos la paz”. Lamentó que “la propia Pastoral Aborigen junto a Ka’a Kupé generan problemas y están discriminando a las demás comunidades que no piensan como ellos”.
Morinigo aseguró que “estuvimos hablando con algunos integrantes de la comunidad Ka’a Kupé, donde tienen problemas internos con los que acompañaron al monte para generar problemas y golpearon a los trabajadores de la empresa”.
Además, opinó que “con Mario Borjas (el actual cacique) la situación está muy mal y ya hablamos de un procedimiento donde debe intervenir la Justicia”.
De ahora en más “con las tres comunidades que vivimos dentro de esta propiedad y con todos de acuerdo con el trabajo de esta empresa, con convenio y un reconocimiento, esperamos todo se solucione”, añadió.
Néstor Morinigo acusó que “algunos caciques están muy equivocados y son influenciados. Desde las comunidades queremos que dejen de molestar tanto a los demás como la empresa”. Como parte del pueblo mbya guaraní aseguró que “ahora se intenta conseguir un título de propiedad para que las familias puedan vivir y trabajar”.
Con las hectáreas puestas a disposición de estas comunidades de Campo Grande, remarcó que “buscamos solucionar la propiedad de este terreno para construir viviendas y una escuela. También queremos generar un proyecto productivo en estas tierras donadas. Tratamos de solucionar todo tipo de problemas con las tierras, de manera independiente y en contacto con la empresa”.