Momentos de extrema tensión se vivieron anoche en las 2.000 hectáreas de Puerto Iguazú cuando el cuerpo de Bomberos local fue advertido que un joven había caído dentro de un pozo de agua de entre 15 y 18 metros de profundidad. Según fuentes policiales, un vecino habría oído cuando el joven hbaría caído.
De inmediato, un móvil acudió al lugar, donde ya se encontraba personal policial, y se procedió a realizar primero una búsqueda con un gancho tipo ancla y en ese momento se pudo constatar que se trataba de un joven de 21 años, identificado por la Policía como Gustavo Nuñez, quien estaba en la casa de su vecino, aparentemente compartiendo unos tragos.
Para rescatar el cuerpo, la bombero Luz Rodríguez descendió hasta lo profundo del pozo y amarró el cuerpo a un anclaje para poder elevarlo. Una vez fuera, el mismo fue transferido a resguardo policial para que se le realice la correspondiente autopsia.
El dueño del lugar fue demorado preventivamente hasta tanto se determinen las causales del desenlace fatal. En el sitio trabajaron la División Policía Científica y la Comisaría jurisdiccional.