
A tres cuadras de la ruta 12 y en inmediaciones de la terminal de ómnibus en Candelaria, un empleado de una firma de mandados denunció un robo a mano armada. No sufrió lesiones, los ladrones solamente querían el vehículo pero principalmente parte de lo que contenía.
El joven chofer de 24 años domiciliado en Oberá, llegó a la comisaría de Candelaria minutos después de las 7 de ayer, para alertar lo que le había sucedido.
En su presentación indicó que estaba a bordo de un utilitario Mercedes Benz modelo Sprinter, estacionado cerca de la terminal, precisamente sobre la avenida principal Roque González. El vehículo estaba cargado con encomiendas y bolsines con dinero.
Alrededor de las 6.45, sorpresivamente fue abordado por dos delincuentes que a punta de arma de fuego le exigieron que se bajara, según relató. Tomaron la Sprinter y se dieron a la fuga.
El joven dio aviso a la empresa y uno de los supervisores se dirigió hacia la zona para interiorizarse mejor del caso. Radicada la denuncia efectivos de la comisaría local iniciaron rastrillajes por diferentes barrios de la localidad en busca de la camioneta y de los sospechosos.
No había llegado ni siquiera la media mañana cuando hallaron la unidad, estacionada apenas a una dos cuadras de donde fue sustraída. Específicamente estaba sobre calle Carlos Pellegrini, entre Lavalle y Chacabuco. No había rastros de los malvivientes.
El representante de la empresa constató que al parecer estaban todas las encomiendas, pero faltaban los bolsines con dinero de reembolsos de los clientes. Efectivos de la Unidad Regional X continuaban con la investigación para hallar a los asaltantes.