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La autopsia indicó que el joven de 19 años recibió un disparo en la cabeza, desde corta distancia. El lunes, el juez Ariel Belda Palomar indagará al único detenido hasta el momento por el crimen.
Los primeros resultados de la autopsia practicada en la Morgue Judicial de Posadas al cuerpo del joven Ariel Camargo de Lara (19) indican que fue ejecutado de un solo tiro y presumiblemente con un arma de fuego calibre 38 milímetros.
La altura por la que ingresó la bala a la cabeza de la víctima, hace suponer que lo tenían de frente y aparentemente arrodillado.
Esas primeras impresiones presumen que al menos el que le disparó estaba por encima de su posición según indicó una fuente. La causa fue caratulada provisoriamente como “homicidio simple” y es tramitada en el Juzgado de Instrucción 1 de San Pedro a cargo de Ariel Belda Palomar.
De consultas realizadas por PRIMERA EDICIÓN con involucrados en la investigación, señalaron que el homicidio de Camargo de Lara, cuyo cuerpo fue encontrado el último miércoles a unos cinco kilómetros del casco urbano de Bernardo de Irigoyen, semienterrado y tapado con ramas, permanece por ahora con un solo sospechoso.
El joven ultimado fue reportado como desaparecido desde el 3 de febrero y casi una semana después lo encontraron asesinado.
Tras el hallazgo del cadáver la policía obtuvo las primeras pistas y enseguida demoró a un joven de 18 años que luego pasó a estar en calidad de detenido y sospechoso. El mismo recién el lunes será sometido a la audiencia indagatoria por parte del juez Belda Palomar, quien investiga el caso por cuestiones de jurisdicción.
Hace unos días se realizó una movilización por calles y avenidas del municipio de Bernardo de Irigoyen que fue organizada por la familia de la víctima y en la misma participaron amistades y allegados.
El hallazgo del cadáver fue la culminación de una búsqueda que se inició tras la denuncia de los parientes del muchacho, quienes contaron a los investigadores policiales que lo vieron por última vez el pasado jueves 3 de febrero a la madrugada.
Casi una semana después dieron con el joven muerto cuyo cuerpo estaba semienterrado y en avanzado estado de descomposición.
Si bien ya hubo testigos que aportaron datos clave para que se concrete la aprehensión del único sospechoso, desde la Justicia quieren manejarse con cautela con la ronda de testimoniales prevista para los próximos días y no descartan que surjan más detenciones.
Una de las hipótesis que manejan los investigadores de la Unidad Regional XII es que al joven lo llevaron bajo engaños hasta el lugar donde lo ejecutaron.
Al menos desde su familia dejaron en claro que fueron a buscarlo en un vehículo, lo que no se puede establecer hasta el momento o al menos no trascendió, son las características del automóvil y cuántas personas iban en su interior.
Lo que tampoco está claro hasta el momento es el móvil del crimen y si efectivamente participaron en el homicidio varias personas. Se baraja la posibilidad de que la trama que desencadenó en el asesinato sea una supuesta deuda de la víctima con otras personas en torno a la compra-venta de vehículos presuntamente robados, actividad ligada al único detenido.
En el lugar conocido como “Cuatro Bocas”, en el paraje San Roque finalmente el miércoles pasado a las 13 dieron con el cadáver y si bien a simple vista se preveía la posibilidad de que fuera asesinado con un arma de fuego, ahora con los resultados preliminares esta teoría quedó confirmada. Ahora resta dar con el arma utilizada y comprobar o descartar participación de más personas.