
Las horas de tristeza continúan en Villa Sarita. Es todavía muy pronto para olvidar la derrota del domingo ante Juventud Antoniana, por 1-0, en la finalísima que le dio a los salteños el ascenso al Torneo Federal A. Sin embargo, ya se vislumbra la luz al final del túnel para Guaraní, que busca dar vuelta la página y pensar en lo que viene.
A fuerza de triunfos y una campaña que, más allá de la caída en Santiago del Estero, dejó números positivos, el entrenador Carlos Marczuk se ganó el cariño del pueblo franjeado. La dirigencia tomó nota y el presidente Patricio Vedoya ya le anticipó a EL DEPORTIVO que buscarán mantener al DT de cara al próximo Regional Amateur.
“Vamos a tratar que Marczuk y su equipo sigan en Guaraní. El grupo de trabajo fue espectacular. Creo que encontramos un técnico que, si bien viene de la vereda de enfrente, se apasionó por el club y le dolió mucho la derrota del domingo. El ‘feeling’ con la gente fue de menor a mayor. Además, hizo todo un sacrificio, porque vive en Oberá y se mudó tres días a la semana para entrenar al equipo. No hay nada que reprochar, la desilusión es por no haber ascendido, pero estamos conformes con el trabajo realizado”, explicó Vedoya sobre el exjugador y técnico de Crucero del Norte, quien parece haberse ganado un lugar en La Franja que se viene.
En ese sentido, el mandatario agregó que el entrenador “demostró ser una persona simple, además eligió bien a los jugadores. Estamos muy conformes con lo que se trabajó, que está a la vista porque perdimos un solo partido y fuimos el equipo que más puntos obtuvo”.
Vedoya resaltó que Guaraní llegó a dos de las tres últimas finales por el ascenso al Federal A y, al respecto, comparó la del domingo con aquella polémica derrota en la serie ante Central Norte de 2019. “Hoy la sensación es otra, si nos hubiesen robado como contra Central Norte, hubiese sido distinto a perder un partido así. Esta vez, no fue el árbitro. Ellos patearon una vez y entró. Todo eso nos da ganas de seguir”, aseguró el presidente.
Y en esa misma línea, Vedoya reconoció que, respecto al domingo y a diferencia de 2019, “tampoco se le puede reprochar nada a los árbitros”, aunque sí tocó el tema de la “cancha neutral” y la disparidad de distancias que debió recorrer Guaraní en comparación con Juventud: “Nosotros tuvimos que hacer mil kilómetros en colectivo y ellos, 400. Algo más neutral hubiese sido jugar en Buenos Aires, que nos queda a los dos a mil kilómetros. Obviamente nosotros tuvimos más gasto tanto en lo económico como en lo físico”.
Siempre con la idea de dar vuelta la página y pensar en lo que viene, el dirigente apuntó ahora “a ganar el torneo de la liga local, tanto para asegurar una plaza en el próximo Regional como para empezar a formar las bases para el próximo Regional”, sintetizó Vedoya, en razón de que la licencia deportiva de tres años que había recibido Guaraní por parte del Consejo Federal para jugar el Regional expiró en este último torneo. No obstante, todo apunta a que, tanto por historia como por esta última campaña, La Franja contaría nuevamente con una invitación a la próxima edición del torneo.
“Estoy dolido, muy triste, merecíamos otro final”
La vuelta a casa no fue la esperada. En medio de una enorme tristeza, ayer al mediodía el plantel de Guaraní arribó a Villa Sarita desde Santiago del Estero. Caras largas y poco ánimo fueron las sensaciones tanto de jugadores como del cuerpo técnico.
De todas maneras, más allá de la derrota, Carlos Marczuk accedió a hablar con los medios presentes. Y aunque aún no definió si afrontará un nuevo desafío junto a La Franja en el Regional que arrancaría en el segundo semestre, brindó algunas palabras el día después de la caída.
“Creo que planteamos bien el partido, posicionándonos bien alto para que ellos no tengan salida clara. Así fue hasta el corte para tomar agua. Desde entonces, ellos empezaron a crecer. Y es así, estas son finales y se definen por detalles. Una mala tarde te puede dejar afuera de todo y creo que en el segundo tiempo tuvimos una mala tarde y no pudimos encontrar los caminos para llegar al empate”, analizó Marczuk.
Por último, el director técnico obereño reconoció la angustia por haber llegado tan cerca del objetivo. “Estoy muy dolido, muy triste, creo que habíamos hecho un buen torneo y nos merecíamos otro final. Agradezco a todos los hinchas de Guaraní y pido disculpas por no haberles podido dar la alegría que se merecían”, cerró.