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Las constantes preocupaciones, el estrés y la tensión con que viven las personas han potenciado la aparición de síntomas y afecciones, especialmente relacionados al sistema digestivo. Esto, entre otras cosas, hizo que hoy las consultas gastroenterológicas sean una de las más demandadas, y que la mayoría de ellas, sean producto de patologías psicosomáticas, es decir, relacionadas al estrés. Así lo confirmó a PRIMERA EDICIÓN el gastroenterólogo Daniel Boglietti.
“La gastroenterología, en las últimas décadas estaba muy atrás, pero comenzó a crecer repentinamente, esto se atribuye a dos cosas: la primera a la prevención del cáncer de colon, que muchos países han tomado como bandera, y la segunda por las patologías psicosomáticas, es decir, manifestaciones gastroenterológicas como dolores estomacales, sensación de acidez, dificultades para ir de cuerpo, que son síntomas secundarios a causa del estrés”, explicó el especialista
Esto hace que hasta un 60% de las consultas que se reciben en consultorio del Sanatorio Boratti, deriven en una afección psicosomática. “Es complejo porque estas patologías no tienen un diagnóstico preciso, como una ulcera por ejemplo, es decir, no hay algo orgánico, se llega a ellas por descarte”, manifestó.
Esto a su vez, no implica un proceso sencillo ya que, en todos los casos, siempre se descarta primero una enfermedad orgánica, a partir de una serie de estudios. Es así que “si lo que se encuentra en los análisis no corresponde con los síntomas de la persona, estamos frente a una patología psicosomática”, explicó.
No hay una cura
Cuando pasa esto, “le decimos al paciente que no hay una cura, ya que es una forma del cuerpo de manifestar la angustia y la preocupación”, expresó. Es decir, se trata de un cuadro que es crónico donde cada persona somatiza de manera diferente: algunas con dolores de cabeza, palpitaciones, o síntomas digestivos.
Esta complejidad propicia “situaciones difíciles de explicar: la persona quizás no tiene un problema puntual y está atravesando una vida tranquila, pero muchas veces en el día a día, la preocupación le afecta”, indicó el especialista. Por otro lado, “también están los pacientes que están atravesando una situación difícil, como la muerte o enfermedad de algún familiar y que, ante el estrés, manifiesta síntomas digestivos”.
A esto, el tratamiento indicado no solo es una alimentación más sana sino la psicoterapia que ayuda a canalizar las emociones que podrían afectar al cuerpo; ya que, “en muchos casos, la persona vuelve a tener lo mismo una y otra vez, es decir, manifiesta síntomas similares ante el estrés.”
La importancia de prevenir
A pesar que las afecciones psicosomáticas son mayoría, también se diagnostican enfermedades inflamatorias, úlceras, esofagitis, gastropatías, y pólipos, “que al sacarlos muchas veces se corta la progresión hacia un cáncer”.
Es así que, mediante las aproximadamente 500 endoscopías altas y bajas realizadas mensualmente en el Boratti, se busca con mucho énfasis prevenir el cáncer, una tarea titánica ya que, el de colon, tiene gran incidencia en el país, y Misiones no escapa de esas cifras. “Desgraciadamente por mes descubrimos cuatro, cinco casos de cáncer de colon. Cada vez que aparecen vemos que fracasó la prevención, porque estamos llegando tarde”, confesó Boglietti.
Hacerse los estudios es sumamente necesario ya que “en un 80% esta enfermedad es presidida por un pólipo, que pudo haberse extraído a tiempo”, finalizó.