Tras la expectativa que se generó respecto del plan de “guerra” contra la inflación que pondrá en marcha el Gobierno, el presidente Alberto Fernández anunció anoche que decidió “constituir un fondo de estabilización con el objetivo de evitar el traslado de esta suba del precio internacional (del trigo) al precio que pagan los argentinos y argentinas”, y aseguró la vocación del Gobierno de construir “acuerdos con los diferentes sectores” pero sin dudar en “aplicar todas las herramientas del estado para fijar y hacer cumplir las medidas necesarias”.
“He instruido a mis ministros para que tomen las medidas necesarias y ellos serán los encargados de comunicarlas a partir de mañana (por hoy)”, precisó el Presidente en un mensaje grabado desde la Quinta de Olivos, al tiempo que reveló que el gabinete económico se concentrará en “implementar todas las medidas necesarias para enfrentar a la inflación, en particular la que vemos en los alimentos”.
Fernández detalló que la “batalla del Gobierno nacional es contra los especuladores y los codiciosos” y anunció que dialogará “con cada gobernador y gobernadora y con todos los intendentes para las medidas que adoptemos lleguen a cada rincón de la Argentina”.
“Necesitamos luchadores contra la especulación y la inflación en cada comercio, en cada mesa, en cada casa. Esta batalla necesita de cada uno de nosotros y nosotras”, remarcó el jefe de Estado. Además, el Presidente dijo que instruyó a sus ministro a que utilicen la Ley de Abastecimiento si fuera necesario.
Convocatoria
El presidente convocó a representantes de los sectores productivos, empresarios, trabajadores formales y de la economía popular, representantes del campo y el comercio, la pequeña y mediana empresa y la sociedad civil a “una mesa de acuerdo que permita diseñar un mañana en la lucha contra la inflación”.
En un mensaje grabado desde la Quinta de Olivos, el mandatario afirmó que se está en “una situación extraordinaria que requiere soluciones extraordinarias” y advirtió que su gobierno “no va a dejar de controlar y fiscalizar precios, aplicar la ley de abastecimiento si es necesario y utilizar todos los instrumentos con los que cuenta el estado para cumplir con el objetivo de controlar los precios”.
El mandatario sostuvo que el país “necesita fortalecer expectativas”, y pidió a los argentinos “sentarse a un misma mesa” con el propósito de alcanzar “los entendimientos necesarios para construir el futuro”, al anunciar un conjunto de medidas económicas en un mensaje grabado desde la Residencia de Olivos.
“Necesitamos fortalecer expectativas. Esto sólo lo conseguiremos si somos capaces de sentarnos a una misma mesa para construir el futuro. No podemos hacerlo mientras sigamos viviendo en un país en el que algunos, por las dudas suben los precios con total desdén”, apuntó Fernández en uno de los tramos de su alocución.
La importancia del acuerdo
Al realizar los anuncios, el Presidente sostuvo que el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) “permite comenzar a ordenar las variables macroeconómicas centrales en la lucha contra la inflación”, a la que consideró como un “un fenómeno multicausal”.
“Para atacarla debemos acumular reservas, mejorar el crédito público, desacoplar los precios internos de los internacionales, trabajar sobre las políticas de ingresos y precios al mismo tiempo y tomar una batería de medidas en las que múltiples actores son imprescindibles”, explicó Fernández en un mensaje grabado desde la residencia de Olivos.
También aseguró que se atraviesa “un momento bisagra de la historia argentina y mundial, señaló que “se suman nuevas tensiones a viejos desafíos” que no se pudieron o se supieron “encarar”, y remarcó que la inflación es un “fenómeno histórico en la Argentina, casi una maldición” con la que muchos crecieron, “un callejón recurrente del que pareciera ser imposible salir”.
“Llevamos diez años consecutivos con una inflación de dos dígitos. Cuando asumí mis funciones en diciembre de 2019, Argentina registraba una inflación que orillaba el 54% anual”, recordó, y resaltó que “resolver el problema de la inflación en Argentina nos exige revisar nuestra experiencia, comprender la complejidad que tiene y darnos un camino de salida en el que todos nos comprometamos”.
Se adelantaron
Se sabe: cada decisión política tiene un impacto inevitable sobre la realidad. Más si se trata de la palabra presidencial. Algo de esto sucedió en las últimas horas. Bastó que Alberto Fernández adelantara que iniciaría una “guerra contra la inflación” para que, sin quererlo, eso desatara una avalancha de aumentos de precios. Justo lo contrario de lo que intenta calmar el jefe de Estado.
Ocurrió lo inevitable: si el Presidente adelanta que habrá medidas que impactarán en los balances de las empresas, esas compañías tomen decisiones defensivas. Y apliquen aumentos en los precios de los productos que venden.
Las principales empresas líderes aplicaron ajustes en sus listas en las últimas horas. O les avisaron a sus clientes -supermercados y mayoristas- que lo harán inmediatamente. Algunos ejemplos: La Serenísima y SanCor mandaron subas de hasta 9,8%. Arcor avisó 15% de ajuste a partir de hoy mismo en sus productos. Fueron los últimos avisos pero no los únicos. La empresa Granix (galletitas, barras de cereales) incrementó sus productos un 12%, que sigue al aumento del 15% que había aplicado diez días antes.