Este jueves, el Tribunal Penal 2 de Posadas condenó a prisión perpetua a Lotario Puzin por el femicidio de Fidencia Estela Arapayú, quien fuera asesinada en mayo de 2019 en Colonia Oasis, según reza el expediente.
“Creo que para Estela esto de alguna manera es darle voz, eso es lo que le pasó y ella no lo pudo contar“, comentó tras el juicio a PRIMERA EDICIÓN el fiscal de la causa Vladimir Glinka.
“Del juicio me queda un sensación fea acerca de la declaración de (Ricardo) Cholfo, porque el día previo a que (Puzin) la asesine, él se ofreció a buscarla para sacarla de ahí, y ella dijo que no para evitar generar más conflictos. Si hay algo con que quedarse es tratar acordarse de eso, porque yo se que en el contexto es muy difícil, pero que las mujeres tengan el coraje, sería muy bueno el no creer que aceptar ayuda va a complicar aún más las cosas, ¿Qué es más complicado que lo que paso? si la mataron a golpes. La sensación fea es que existió, por un breve instante, la posibilidad de que todo esto no suceda”, reflexionó.
Lotario Pablo Puzin fue declarado como autor penalmente responsable del delito de “homicidio triplemente agravado por el vínculo, con alevosía y por ser cometido por un hombre contra una mujer, en un contexto de violencia de género”. Acerca de la decisión de los jueces y la sentencia a prisión perpetua, Glinka indicó que “No lo pienso en los años (de la pena), no tengo esa visión, no me parece que decir 10, 15 o 35 años solucione algo, realmente me interesa que, dentro del tratamiento penitenciario que va a recibir, él definitivamente entienda porque está ahí. Lastimosamente Estela ya no está, pero no sirve de nada que él pase los años que sean pensando que es injusto lo que le pasó, o que de alguna manera tenía alguna justificación, eso es lo importante“.
En ese sentido, se refirió a lo que significó este caso y el mensaje que nos deja como sociedad: “Estamos en un momento crítico, la verdad que este fue un crimen muy violento, había mucha bronca, mucho odio, y estamos hablando de personas que se conocían hace más de una década. (…) Tenemos que tomar conciencia que estas cosas pasan y que cada vez sucede más. Insisto con que tener el coraje para aceptar ayuda es difícil, porque en general estas personas, como ocurrió con Estela, creen que van a tener más problemas si acepta ayuda, lo cual es tremendo porque se sienten realmente solas, y a veces hay personas con intenciones de ayudar”
Con esta reflexión, hizo un llamado a todas aquellas personas que puedan estar pasando por una situación de violencia. “Dentro de ese contexto, en que les cuesta tanto salir de ese círculo, saber que Estela se podría haber salvado si aceptaba ayuda. Entonces, si alguna persona en esa situación se acerca de este caso, que lo vea desde ahí, que ‘no quiero terminar como Estela’, y tratar de buscar ayuda para evitar estos desenlaces“, cerró.